Ahora pues, hijos, escúchenme, Porque bienaventurados son los que guardan mis caminos.
(Proverbios 8:32)
Escuchen la instrucción y sean sabios, Y no la desprecien.
(Proverbios 8:33)
Bienaventurado el hombre que me escucha, Velando a mis puertas día a día, Aguardando en los postes de mi entrada.
(Proverbios 8:34)
Porque el que me halla, halla la vida Y alcanza el favor del SEÑOR.
Pero el que peca contra mí, a sí mismo se daña; Todos los que me odian, aman la muerte."
(Proverbios 8:36)
La sabiduría ha edificado su casa, Ha labrado sus siete columnas;
(Proverbios 9:1)
Ha preparado su alimento, ha mezclado su vino, Ha puesto también su mesa;
(Proverbios 9:2)
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Proverbios 8:35 - Referencia Cruzada
Y el testimonio es éste: que Dios nos ha dado vida eterna, y esta vida está en Su Hijo.
(1 Juan 5:11)
Pero el que me escucha vivirá seguro, Y descansará, sin temor al mal."
(Proverbios 1:33)
para alabanza de la gloria de Su gracia que gratuitamente ha impartido sobre nosotros en el Amado.
(Efesios 1:6)
Porque ustedes han muerto, y su vida está escondida con Cristo en Dios.
(Colosenses 3:3)
El que cree en el Hijo tiene vida eterna; pero el que no obedece al Hijo no verá la vida, sino que la ira de Dios permanece sobre él."
(Juan 3:36)
Bienaventurado el hombre que halla sabiduría Y el hombre que adquiere entendimiento.
(Proverbios 3:13)
Jesús le dijo: "Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre sino por Mí.
(Juan 14:6)
Y aún más, yo estimo como pérdida todas las cosas en vista del incomparable valor de conocer a Cristo Jesús, mi Señor. Por El lo he perdido todo, y lo considero como basura a fin de ganar a Cristo,
(Filipenses 3:8)
Y ésta es la vida eterna: que Te conozcan a Ti, el único Dios verdadero, y a Jesucristo, a quien has enviado.
(Juan 17:3)
Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dio a Su Hijo unigénito (único), para que todo aquél que cree en El, no se pierda, sino que tenga vida eterna.
(Juan 3:16)
Porque son vida para los que las hallan, Y salud para todo su cuerpo.
(Proverbios 4:22)
El bueno alcanzará el favor del SEÑOR, Pero El condenará al hombre de malos designios.
(Proverbios 12:2)