Nueva Biblia Latinoamericana
Mira a la derecha, y ve, Porque no hay quien me tome en cuenta; No hay refugio para mí; No hay quien cuide de mi alma. (Salmos 142:4)
A Ti he clamado, SEÑOR; Dije: "Tú eres mi refugio, Mi porción en la tierra de los vivientes. (Salmos 142:5)
Atiende a mi clamor, Porque estoy muy abatido; Líbrame de los que me persiguen, Porque son más fuertes que yo. (Salmos 142:6)
Saca mi alma de la prisión, Para que yo dé gracias a Tu nombre; Los justos me rodearán, Porque Tú me colmarás de bendiciones."
Salmo de David. Oh SEÑOR, escucha mi oración, Presta oído a mis súplicas, Respóndeme por Tu fidelidad, por Tu justicia; (Salmos 143:1)
Y no entres en juicio con Tu siervo, Porque no es justo delante de Ti ningún ser humano. (Salmos 143:2)
Pues el enemigo ha perseguido mi alma, Ha aplastado mi vida contra la tierra; Me ha hecho morar en lugares tenebrosos, como los que hace tiempo están muertos. (Salmos 143:3)

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Salmos 142:7 - Referencia Cruzada

Que los que Te temen, me vean y se alegren, Porque espero en Tu palabra. (Salmos 119:74)
Masquil de David, cuando estaba en la cueva. Plegaria. Clamo al SEÑOR con mi voz; Con mi voz suplico al SEÑOR. (Salmos 142:1)
El Espíritu del Señor DIOS está sobre mí, Porque me ha ungido el SEÑOR Para traer buenas nuevas a los afligidos. Me ha enviado para vendar a los quebrantados de corazón, Para proclamar libertad a los cautivos Y liberación a los prisioneros; (Isaías 61:1)
Miren que tenemos por bienaventurados a los que sufrieron (perseveraron). Han oído de la paciencia (firmeza) de Job, y han visto el resultado del proceder del Señor, que el Señor es muy compasivo y misericordioso. (Santiago 5:11)
Por amor a Tu nombre, SEÑOR, vivifícame; Por Tu justicia, saca mi alma de la angustia. (Salmos 143:11)
Que hace justicia a los oprimidos, Y da pan a los hambrientos. El SEÑOR pone en libertad a los cautivos. (Salmos 146:7)
Para que yo cuente todas Tus alabanzas, Para que en las puertas de la hija de Sion Me regocije en Tu salvación. (Salmos 9:14)
Sálvame de la boca del león Y de los cuernos de los búfalos; respóndeme. (Salmos 22:21)
Cuando mis enemigos retroceden, Tropiezan y perecen delante de Ti. (Salmos 9:3)
Guímel. Favorece a Tu siervo, Para que viva y guarde Tu palabra. (Salmos 119:17)
En el SEÑOR se gloriará mi alma; Lo oirán los humildes y se regocijarán. (Salmos 34:2)
Pero Dios Lo resucitó, poniendo fin a la agonía (los dolores) de la muerte, puesto que no era posible que El quedara bajo el dominio de ella. (Hechos 2:24)
Soy contado entre los que descienden a la fosa; He llegado a ser como hombre sin fuerza, (Salmos 88:4)
Cantaré al SEÑOR, Porque me ha llenado de bienes. (Salmos 13:6)
Y no me has entregado en manos del enemigo; Tú has puesto mis pies en lugar espacioso. (Salmos 31:8)
Vuelve, alma mía, a tu reposo, Porque el SEÑOR te ha colmado de bienes. (Salmos 116:7)
Levántate, oh SEÑOR, en Tu ira; Alzate contra la furia de mis adversarios, Y despiértate en favor mío; Tú has establecido juicio. (Salmos 7:6)
Pero al pobre lo levanta de la miseria y lo pone seguro en alto, Y multiplica sus familias como un rebaño. (Salmos 107:41)