Nueva Biblia Latinoamericana
Has rechazado a todos los que se desvían de Tus estatutos, Porque su engaño es en vano. (Salmos 119:118)
Como basura has quitado de la tierra a todos los impíos, Por tanto amo Tus testimonios. (Salmos 119:119)
Mi carne se estremece por temor a Ti, Y de Tus juicios tengo miedo. (Salmos 119:120)
Ayin. He practicado el juicio y la justicia; No me abandones a mis opresores.
Sé fiador de Tu siervo para bien; Que no me opriman los soberbios. (Salmos 119:122)
Desfallecen mis ojos por Tu salvación Y por la promesa de Tu justicia. (Salmos 119:123)
Haz con Tu siervo según Tu misericordia Y enséñame Tus estatutos. (Salmos 119:124)

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Espera al Señor pacientemente
Aprende a esperar pacientemente en Dios y mantener tu fe y confianza en Él, a pesar de las pruebas y dificultades que enfrentes. Sé fiel a Él y otros verán tu testimonio y confiarán en Dios.


Salmos 119:121 - Referencia Cruzada

Entonces Pablo respondió: "Ante el tribunal del César estoy, que es donde debo ser juzgado. Ningún agravio he hecho a los Judíos, como también usted muy bien sabe. (Hechos 25:10)
Porque nuestra satisfacción es ésta: el testimonio de nuestra conciencia que en la santidad y en la sinceridad que viene de Dios, no en sabiduría carnal sino en la gracia de Dios, nos hemos conducido en el mundo y especialmente hacia ustedes. (2 Corintios 1:12)
Mire, padre mío, mire la orilla de su manto en mi mano. Puesto que corté la orilla de su manto y no lo maté, reconozca y vea que no hay maldad ni rebelión en mis manos y que no he pecado contra usted, a pesar de que usted acecha mi vida para quitármela. (1 Samuel 24:11)
Le ruego que perdone la ofensa de su sierva, porque el SEÑOR ciertamente establecerá una casa duradera para mi señor, pues mi señor pelea las batallas del SEÑOR, y el mal no se hallará en usted en todos sus días. (1 Samuel 25:28)
El SEÑOR me ha premiado conforme a mi justicia; Conforme a la pureza de mis manos me ha recompensado. (Salmos 18:20)
Cuando Yo escoja el tiempo oportuno, Seré Yo quien juzgará con equidad. (Salmos 75:2)
David reinó sobre todo Israel, y administraba justicia y derecho a todo su pueblo. (2 Samuel 8:15)
Oh SEÑOR, Dios mío, si yo he hecho esto, Si hay en mis manos injusticia, (Salmos 7:3)
El SEÑOR no dejará al justo en sus manos, Ni permitirá que lo condenen cuando sea juzgado. (Salmos 37:33)
Nos acompañaron también algunos de los discípulos de Cesarea, quienes nos condujeron a Mnasón, de Chipre, un antiguo discípulo con quien deberíamos hospedarnos. (Hechos 21:16)
El Señor, pues, sabe rescatar de tentación (de prueba) a los piadosos, y reservar a los injustos bajo castigo para el día del juicio, (2 Pedro 2:9)
El enviará desde los cielos y me salvará; El reprocha al que me pisotea. (Selah) Dios enviará Su misericordia y Su verdad. (Salmos 57:3)