Nueva Biblia Latinoamericana
Entonces Pablo respondió: "¿Qué hacen, llorando y quebrantándome el corazón? Porque listo estoy no sólo a ser atado, sino también a morir en Jerusalén por el nombre del Señor Jesús." (Hechos 21:13)
Como no se dejaba persuadir, dejamos de insistir, diciéndonos: " Que se haga la voluntad del Señor." (Hechos 21:14)
Después de estos días nos preparamos y comenzamos a subir hacia Jerusalén. (Hechos 21:15)
Nos acompañaron también algunos de los discípulos de Cesarea, quienes nos condujeron a Mnasón, de Chipre, un antiguo discípulo con quien deberíamos hospedarnos.
Cuando llegamos a Jerusalén, los hermanos nos recibieron con regocijo. (Hechos 21:17)
Al día siguiente Pablo fue con nosotros a ver a Jacobo (Santiago, hermano de Jesús), y todos los ancianos estaban presentes. (Hechos 21:18)
Después de saludarlos, comenzó a referirles una por una las cosas que Dios había hecho entre los Gentiles mediante su ministerio. (Hechos 21:19)

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Hechos 21:16 - Referencia Cruzada

Oh Dios, Tú me has enseñado desde mi juventud, Y hasta ahora he anunciado Tus maravillas. (Salmos 71:17)
Cuando vimos la isla de Chipre, dejándola a la izquierda, navegamos hacia Siria, y desembarcamos en Tiro porque la nave debía dejar allí su cargamento. (Hechos 21:3)
Ahora bien, los que habían sido esparcidos a causa de la persecución (tribulación) que sobrevino después de la muerte de Esteban, llegaron hasta Fenicia, Chipre y Antioquía, no hablando la palabra a nadie, sino sólo a los Judíos. (Hechos 11:19)
Al otro día entró en Cesarea. Cornelio los estaba esperando y había reunido a sus parientes y amigos íntimos. (Hechos 10:24)
La cabeza canosa es corona de gloria, Y se encuentra en el camino de la justicia. (Proverbios 16:31)
Al día siguiente partimos y llegamos a Cesarea, y entrando en la casa de Felipe, el evangelista, que era uno de los siete (diáconos), nos quedamos con él. (Hechos 21:8)
Se produjo un desacuerdo tan grande que se separaron el uno del otro. Bernabé tomó consigo a Marcos y se embarcó rumbo a Chipre, (Hechos 15:39)
Pero Felipe se encontró en Azoto, y por donde pasaba, anunciaba el evangelio en todas las ciudades, hasta que llegó a Cesarea. (Hechos 8:40)
Y mandó que fueran bautizados en el nombre de Jesucristo. Entonces le pidieron que se quedara con ellos unos días. (Hechos 10:48)
Aun en la vejez darán fruto; Estarán vigorosos y muy verdes, (Salmos 92:14)
Les escribo a ustedes, padres, porque conocen a Aquél que ha sido desde el principio. Les escribo a ustedes, jóvenes, porque han vencido al maligno. Les he escrito a ustedes, niños, porque conocen al Padre. (1 Juan 2:13)
no obstante, por causa del amor que te tengo, te hago un ruego, siendo como soy, Pablo, anciano, y ahora también prisionero de Cristo Jesús: (Filemón 1:9)
Saluden a Andrónico y a Junias, mis parientes y compañeros de prisión, que se destacan entre los apóstoles y quienes también vinieron a Cristo antes que yo. (Romanos 16:7)