Nueva Biblia Latinoamericana
Gloria y majestad están delante de El; Poder y hermosura en Su santuario. (Salmos 96:6)
Den al SEÑOR, oh familias de los pueblos, Den al SEÑOR gloria y poder. (Salmos 96:7)
Den al SEÑOR la gloria debida a Su nombre; Traigan ofrenda y entren en Sus atrios. (Salmos 96:8)
Adoren al SEÑOR en vestiduras santas; Tiemblen ante Su presencia, toda la tierra.
Digan entre las naciones: "El SEÑOR reina; Ciertamente el mundo está bien afirmado, será inconmovible; El juzgará a los pueblos con equidad." (Salmos 96:10)
Alégrense los cielos y regocíjese la tierra; Ruja el mar y cuanto contiene; (Salmos 96:11)
Gócese el campo y todo lo que en él hay. Entonces todos los árboles del bosque cantarán con gozo (Salmos 96:12)

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Salmos 96:9 - Referencia Cruzada

Cambiaron la belleza de Sus ornamentos en orgullo, y de ellos hicieron las imágenes de sus abominaciones y de sus cosas detestables; por tanto, haré que esto sea cosa abominable para ellos. (Ezequiel 7:20)
Tú, sólo Tú, has de ser temido; ¿Y quién podrá estar en pie en Tu presencia en el momento de Tu ira? (Salmos 76:7)
Y plantará las tiendas de su pabellón entre los mares y el monte glorioso y santo. Pero llegará a su fin y no habrá quien lo ayude. (Daniel 11:45)
Tiembla, oh tierra, ante la presencia del Señor, Ante la presencia del Dios de Jacob, (Salmos 114:7)
Tu pueblo se ofrecerá voluntariamente en el día de Tu poder; En el esplendor de la santidad, desde el seno de la aurora; Tu juventud es para Ti como el rocío. (Salmos 110:3)
Tema al SEÑOR toda la tierra; Tiemblen en Su presencia todos los habitantes del mundo. (Salmos 33:8)
Bendito sea el SEÑOR, Dios de nuestros padres, que ha puesto esto en el corazón del rey, para embellecer la casa del SEÑOR que está en Jerusalén, (Esdras 7:27)
Hagan votos ustedes al SEÑOR su Dios, y cúmplanlos ; Todos los que están alrededor de El traigan presentes al que debe ser temido. (Salmos 76:11)
Tributen al SEÑOR la gloria debida a Su nombre; Adoren al SEÑOR en la majestad de la santidad. (Salmos 29:2)
Mientras algunos estaban hablando del templo, de cómo estaba adornado con hermosas piedras y ofrendas votivas, Jesús dijo: (Lucas 21:5)