Nueva Biblia Latinoamericana
En cuya mano están las profundidades de la tierra; Suyas son también las cumbres de los montes. (Salmos 95:4)
Suyo es el mar, pues El lo hizo, Y Sus manos formaron la tierra firme. (Salmos 95:5)
Vengan, adoremos y postrémonos; Doblemos la rodilla ante el SEÑOR nuestro Hacedor. (Salmos 95:6)
Porque El es nuestro Dios, Y nosotros el pueblo de Su prado y las ovejas de Su mano. Si ustedes oyen hoy Su voz,
No endurezcan su corazón como en Meriba, Como en el día de Masah en el desierto, (Salmos 95:8)
Cuando sus padres Me tentaron, Me pusieron a prueba, aunque habían visto Mi obra. (Salmos 95:9)
Por cuarenta años Me repugnó aquella generación, Y dije: "Es un pueblo que se desvía en su corazón Y no conocen Mis caminos. (Salmos 95:10)

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Salmos 95:7 - Referencia Cruzada

Yo soy el SEÑOR tu Dios, que te saqué de la tierra de Egipto, de la casa de servidumbre (de la esclavitud). (Éxodo 20:2)
Miren, el Señor DIOS vendrá con poder, Y Su brazo gobernará por El. Con El está Su galardón, Y Su recompensa delante de El. (Isaías 40:10)
Salmo de David. El SEÑOR es mi pastor, Nada me faltará. (Salmos 23:1)
Nuestro Dios está en los cielos; El hace lo que Le place. (Salmos 115:3)
Arrepiéntanse, porque el reino de los cielos se ha acercado." (Mateo 3:2)
Pues ustedes andaban descarriados como ovejas, pero ahora han vuelto al Pastor y Guardián (Supervisor) de sus almas. (1 Pedro 2:25)
Sepan que El, el SEÑOR, es Dios; El nos hizo, y no nosotros a nosotros mismos; Pueblo Suyo somos y ovejas de Su prado. (Salmos 100:3)
Antes, exhórtense los unos a los otros cada día, mientras todavía se dice: "Hoy;" no sea que alguno de ustedes sea endurecido por el engaño del pecado. (Hebreos 3:13)
A éste le abre el portero, y las ovejas oyen su voz; llama a sus ovejas por nombre y las conduce afuera. (Juan 10:3)
Por lo cual se dice: "SI USTEDES OYEN HOY SU VOZ, NO ENDUREZCAN SUS CORAZONES, COMO EN LA PROVOCACION." (Hebreos 3:15)
Pero en realidad, anhelan una patria mejor, es decir, la celestial. Por lo cual, Dios no se avergüenza de ser llamado Dios de ellos, pues les ha preparado una ciudad. (Hebreos 11:16)
Yo estoy a la puerta y llamo; si alguien oye Mi voz y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él y él conmigo. (Apocalipsis 3:20)
Tengan cuidado de sí mismos y de toda la congregación, en medio de la cual el Espíritu Santo les ha hecho obispos (supervisores) para pastorear la iglesia de Dios, la cual El compró con Su propia sangre. (Hechos 20:28)
Porque Este es Dios, Nuestro Dios para siempre; El nos guiará hasta la muerte. (Salmos 48:14)
Por lo cual, como dice el Espíritu Santo: "SI USTEDES OYEN HOY SU VOZ, (Hebreos 3:7)
Inclinen su oído y vengan a Mí, Escuchen y vivirá su alma. Y haré con ustedes un pacto eterno, Conforme a las fieles misericordias mostradas a David. (Isaías 55:3)
Porque éste es el pacto que haré con la casa de Israel después de aquellos días," declara el SEÑOR. "Pondré Mi ley dentro de ellos, y sobre sus corazones la escribiré. Entonces Yo seré su Dios y ellos serán Mi pueblo. (Jeremías 31:33)
Dios otra vez fija un día: Hoy. Diciendo por medio de David después de mucho tiempo, como se ha dicho antes: "SI USTEDES OYEN HOY SU VOZ, NO ENDUREZCAN SUS CORAZONES." (Hebreos 4:7)
Y nosotros, pueblo Tuyo y ovejas de Tu prado, Te daremos gracias para siempre; A todas las generaciones hablaremos de Tu alabanza. (Salmos 79:13)
Yo soy el buen pastor, y conozco Mis ovejas y ellas Me conocen, (Juan 10:14)
Escuchen, porque hablaré cosas excelentes, Y con el abrir de mis labios rectitud. (Proverbios 8:6)
Entonces sabrán que Yo, el SEÑOR su Dios, estoy con ellos, y que ellos, la casa de Israel, son Mi pueblo," declara el Señor DIOS. (Ezequiel 34:30)
Mientras estaba aún hablando, una nube luminosa los cubrió; y una voz salió de la nube, diciendo: "Este es Mi Hijo amado en quien Yo estoy complacido; óiganlo a El." (Mateo 17:5)
Mi fortaleza y mi canción es el SEÑOR, Y ha sido para mí salvación; éste es mi Dios, y Lo glorificaré, El Dios de mi padre, y Lo ensalzaré. (Éxodo 15:2)
La tierra ha dado su fruto; Dios, nuestro Dios, nos bendice. (Salmos 67:6)
Masquil de Asaf. Oh Dios, ¿por qué nos has rechazado para siempre? ¿Por qué se enciende Tu ira contra las ovejas de Tu prado? (Salmos 74:1)