POR LO CUAL YO ME DISGUSTE CON AQUELLA GENERACION, Y DIJE: 'SIEMPRE SE DESVIAN EN SU CORAZON, Y NO HAN CONOCIDO MIS CAMINOS;'
(Hebreos 3:10)
COMO JURE EN MI IRA: 'NO ENTRARAN EN MI REPOSO.'"
(Hebreos 3:11)
Tengan cuidado, hermanos, no sea que en alguno de ustedes haya un corazón malo de incredulidad, para apartarse del Dios vivo.
(Hebreos 3:12)
Antes, exhórtense los unos a los otros cada día, mientras todavía se dice: "Hoy;" no sea que alguno de ustedes sea endurecido por el engaño del pecado.
Porque somos hechos partícipes de Cristo, si es que retenemos firme hasta el fin el principio de nuestra seguridad.
(Hebreos 3:14)
Por lo cual se dice: "SI USTEDES OYEN HOY SU VOZ, NO ENDUREZCAN SUS CORAZONES, COMO EN LA PROVOCACION."
(Hebreos 3:15)
Porque ¿quiénes, habiendo oído, Lo provocaron? ¿Acaso no fueron todos los que salieron de Egipto guiados por Moisés?
(Hebreos 3:16)
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Hebreos 3:13 - Referencia Cruzada
Saben además de qué manera los exhortábamos, alentábamos e implorábamos (testificábamos) a cada uno de ustedes, como un padre lo haría con sus propios hijos,
(1 Tesalonicenses 2:11)
El que confía en su propio corazón es un necio, Pero el que anda con sabiduría será librado.
(Proverbios 28:26)
que en cuanto a la anterior manera de vivir, ustedes se despojen del viejo hombre, que se corrompe según los deseos engañosos,
(Efesios 4:22)
Por tanto, confórtense (aliéntense) unos a otros con estas palabras.
(1 Tesalonicenses 4:18)
el cual, cuando vino y vio la gracia de Dios, se regocijó y animaba a todos para que con corazón firme permanecieran fieles al Señor;
(Hechos 11:23)
Consideremos cómo estimularnos unos a otros al amor y a las buenas obras,
(Hebreos 10:24)
Sino que cada uno es tentado cuando es llevado y seducido por su propia pasión.
(Santiago 1:14)
La soberbia de tu corazón te ha engañado, Tú que habitas en las hendiduras de la peña, En las alturas de tu morada; Que dices en tu corazón: '¿Quién me derribará por tierra?'
(Abdías 1:3)
Se alimenta de cenizas; el corazón engañado le ha extraviado. A sí mismo no se puede librar, ni decir: "¿No es mentira lo que tengo en mi diestra?"
(Isaías 44:20)
porque el pecado, aprovechándose del mandamiento, me engañó, y por medio de él me mató.
(Romanos 7:11)
Por tanto, confórtense (aliéntense) los unos a los otros, y edifíquense el uno al otro, tal como lo están haciendo.
(1 Tesalonicenses 5:11)
Predica la palabra. Insiste a tiempo y fuera de tiempo. Amonesta, reprende, exhorta con mucha (toda) paciencia e instrucción.
(2 Timoteo 4:2)