Nueva Biblia Latinoamericana
Porque él librará al necesitado cuando clame, También al afligido y al que no tiene quien lo auxilie. (Salmos 72:12)
Tendrá compasión del pobre y del necesitado, Y la vida de los necesitados salvará. (Salmos 72:13)
Rescatará su vida de la opresión y de la violencia, Y su sangre será preciosa ante sus ojos. (Salmos 72:14)
Que viva, pues, y se le dé del oro de Sabá, Y que se ore por él continuamente; Que todo el día se le bendiga.
Haya abundancia de grano en la tierra, en las cumbres de los montes; Su fruto se mecerá como los cedros del Líbano; Que los de la ciudad florezcan como la hierba de la tierra. (Salmos 72:16)
Sea su nombre para siempre; Que su nombre se engrandezca mientras dure el sol, Y sean benditos por él los hombres ; Llámenlo bienaventurado todas las naciones. (Salmos 72:17)
Bendito sea el SEÑOR Dios, el Dios de Israel, El único que hace maravillas. (Salmos 72:18)

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Salmos 72:15 - Referencia Cruzada

Y las multitudes que iban delante de El y las que iban detrás, gritaban: "¡Hosanna al Hijo de David! ¡BENDITO AQUEL QUE VIENE EN EL NOMBRE DEL SEÑOR! ¡Hosanna en las alturas!" (Mateo 21:9)
Y la Vida (Cristo) se manifestó. Nosotros la hemos visto, y damos testimonio y les anunciamos a ustedes la vida eterna que estaba con el Padre y se manifestó a nosotros. (1 Juan 1:2)
Cuando tomó el libro, los cuatro seres vivientes y los veinticuatro ancianos se postraron delante del Cordero. Cada uno tenía un arpa y copas de oro llenas de incienso, que son las oraciones de los santos. (Apocalipsis 5:8)
Un poco más de tiempo y el mundo no Me verá más, pero ustedes Me verán; porque Yo vivo, ustedes también vivirán. (Juan 14:19)
a la iglesia de Dios que está en Corinto, a los que han sido santificados en Cristo Jesús, llamados a ser santos, con todos los que en cualquier parte invocan el nombre de nuestro Señor Jesucristo, Señor de ellos y nuestro: (1 Corintios 1:2)
El Señor sea con tu espíritu. La gracia sea con ustedes. (2 Timoteo 4:22)
al único Dios nuestro Salvador, por medio de Jesucristo nuestro Señor, sea gloria, majestad, dominio y autoridad, antes de todo tiempo, y ahora y por todos los siglos. Amén. (Judas 1:25)
y el que vive, y estuve muerto. Pero ahora estoy vivo por los siglos de los siglos, y tengo las llaves de la muerte y del Hades (región de los muertos). (Apocalipsis 1:18)
Cuando la reina de Sabá oyó de la fama de Salomón, vino a Jerusalén a probar a Salomón con preguntas difíciles. Ella tenía un séquito muy grande, con camellos cargados de especias y gran cantidad de oro y piedras preciosas. Cuando vino a Salomón, habló con él de todo lo que tenía en su corazón. (2 Crónicas 9:1)
Entonces, hermanos, puesto que tenemos confianza para entrar al Lugar Santísimo por la sangre de Jesús, (Hebreos 10:19)
y toda lengua confiese que Jesucristo es Señor, para gloria de Dios Padre. (Filipenses 2:11)
Venga Tu reino. Hágase Tu voluntad, Así en la tierra como en el cielo. (Mateo 6:10)
para que todos honren al Hijo así como honran al Padre. El que no honra al Hijo, no honra al Padre que Lo envió. (Juan 5:23)
Y todos los reyes de la tierra procuraban ver a Salomón, para oír la sabiduría que Dios había puesto en su corazón. (2 Crónicas 9:23)
Entrando en la casa, vieron al Niño con Su madre María, y postrándose Lo adoraron; y abriendo sus tesoros Le presentaron obsequios de oro, incienso y mirra. (Mateo 2:11)
Antes bien, crezcan en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. A El sea la gloria ahora y hasta el día de la eternidad. Amén. (2 Pedro 3:18)
los manjares de su mesa, las habitaciones de sus siervos, el porte de sus ministros y sus vestiduras, sus coperos y sus vestiduras, y la escalinata por la cual él subía a la casa del SEÑOR, se quedó asombrada. (2 Crónicas 9:4)
Ahora, pues, que el mismo Dios y Padre nuestro, y Jesús nuestro Señor, dirijan nuestro camino a ustedes. (1 Tesalonicenses 3:11)
Hiram, rey de Tiro, respondió en una carta que envió a Salomón: "Por cuanto el SEÑOR ama a Su pueblo, te ha hecho rey sobre ellos." (2 Crónicas 2:11)
Vida Te pidió y Tú se la diste, Largura de días eternamente y para siempre. (Salmos 21:4)
Bendito sea Su glorioso nombre para siempre, Sea llena de Su gloria toda la tierra. Amén y amén. (Salmos 72:19)
Una multitud de camellos te cubrirá, Camellos jóvenes de Madián y de Efa. Todos los de Sabá vendrán, Traerán oro e incienso, Y traerán buenas nuevas de las alabanzas del SEÑOR. (Isaías 60:6)
La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios y la comunión del Espíritu Santo sean con todos ustedes. (2 Corintios 13:14)
y de parte de Jesucristo, el testigo fiel, el primogénito de los muertos y el soberano de los reyes de la tierra. Al que nos ama y nos libertó de nuestros pecados con Su sangre, (Apocalipsis 1:5)
En Tu majestad cabalga en triunfo, Por la causa de la verdad, de la humildad y de la justicia; Que Tu diestra Te enseñe cosas tremendas. (Salmos 45:4)
Jesús le contestó: "Yo soy la resurrección y la vida; el que cree en Mí, aunque muera, vivirá, (Juan 11:25)
En aquel día no Me preguntarán nada. En verdad les digo, que si piden algo al Padre en Mi nombre, El se lo dará. (Juan 16:23)
El peso del oro que llegaba a Salomón en un año era de 22.6 toneladas de oro, (1 Reyes 10:14)