Nueva Biblia Latinoamericana
Al tiempo de la cosecha darán la quinta parte a Faraón, y cuatro partes serán de ustedes para sembrar la tierra y para el mantenimiento de ustedes, para los de sus casas y para alimento de sus pequeños." (Génesis 47:24)
Y ellos dijeron: "Nos ha salvado la vida. Hallemos gracia ante los ojos de Faraón mi señor, y seremos siervos de Faraón." (Génesis 47:25)
Entonces José puso una ley respecto a la tierra de Egipto, en vigor hasta hoy: que Faraón debía recibir la quinta parte. Sólo la tierra de los sacerdotes no llegó a ser de Faraón. (Génesis 47:26)
Israel habitó en la tierra de Egipto, en Gosén. Allí adquirieron propiedades y fueron fecundos y se multiplicaron en gran manera.
Jacob vivió diecisiete años en la tierra de Egipto; así que los días de Jacob, los años de su vida, fueron 147 años. (Génesis 47:28)
Cuando a Israel se le acercó el tiempo de morir, llamó a su hijo José y le dijo: "Si he hallado gracia ante tus ojos, por favor, pon ahora tu mano debajo de mi muslo y trátame con misericordia y fidelidad: Por favor, no me sepultes en Egipto. (Génesis 47:29)
Cuando duerma con mis padres, me llevarás de Egipto y me sepultarás en el sepulcro de ellos." "Haré según tu palabra," le respondió José. (Génesis 47:30)

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Génesis 47:27 - Referencia Cruzada

Pero la paloma no encontró lugar donde posarse, de modo que volvió a él, al arca, porque las aguas estaban sobre la superficie de toda la tierra. Entonces Noé extendió la mano, la tomó y la metió consigo en el arca. (Génesis 8:9)
Pero los Israelitas tuvieron muchos hijos y aumentaron mucho, y se multiplicaron y llegaron a ser poderosos (numerosos) en gran manera, y el país se llenó de ellos. (Éxodo 1:7)
También tu descendencia será como el polvo de la tierra. Te extenderás hacia el occidente y hacia el oriente, hacia el norte y hacia el sur; y en ti y en tu simiente serán bendecidas todas las familias de la tierra. (Génesis 28:14)
E hizo que su pueblo se multiplicara mucho, Y los hizo más fuertes que sus adversarios. (Salmos 105:24)
Y les silbaré para reunirlos, Porque los he redimido; Y serán tan numerosos como eran. (Zacarías 10:8)
Cuando tus padres descendieron a Egipto eran setenta personas, y ahora el SEÑOR tu Dios te ha hecho tan numeroso como las estrellas del cielo. (Deuteronomio 10:22)
Los bendice también y se multiplican mucho, Y no disminuye su ganado. (Salmos 107:38)
Pero a medida que se acercaba el tiempo de la promesa que Dios había confirmado a Abraham, el pueblo crecía y se multiplicaba en Egipto, (Hechos 7:17)
Y El dijo: "Yo soy Dios, el Dios de tu padre; no temas descender a Egipto, porque allí te haré una gran nación. (Génesis 46:3)
y envió un cuervo, que estuvo yendo y viniendo hasta ver que se secaran las aguas sobre la tierra. (Génesis 8:7)
Haré tu descendencia como el polvo de la tierra; de manera que si alguien puede contar el polvo de la tierra, también tu descendencia podrá contarse. (Génesis 13:16)
Te haré fecundo en gran manera, y de ti haré naciones, y de ti saldrán reyes. (Génesis 17:6)
Y tú responderás delante del SEÑOR tu Dios: 'Mi padre fue un Arameo errante y descendió a Egipto y residió allí, siendo pocos en número; pero allí llegó a ser una nación grande, fuerte y numerosa. (Deuteronomio 26:5)
Multiplicaste sus hijos como las estrellas del cielo, Y los llevaste a la tierra Que habías dicho a sus padres que entraran a poseerla. (Nehemías 9:23)
Pero cuanto más los oprimían, más se multiplicaban y más se extendían, de manera que los Egipcios llegaron a temer a los Israelitas. (Éxodo 1:12)
Multiplicaré tu descendencia como las estrellas del cielo, y daré a tu descendencia todas estas tierras. En tu simiente serán bendecidas todas las naciones de la tierra, (Génesis 26:4)