Nueva Biblia Latinoamericana
Tú lo has visto, SEÑOR, no calles; Señor, no estés lejos de mí. (Salmos 35:22)
Despierta y levántate para mi defensa Y para mi causa, Dios mío y Señor mío. (Salmos 35:23)
Júzgame conforme a Tu justicia, oh SEÑOR, Dios mío; Que no se rían de mí. (Salmos 35:24)
Que no digan en su corazón: "¡Esto es lo que queríamos!" Que no digan: "¡Lo hemos devorado!"
Sean avergonzados y humillados a una los que se alegran de mi mal; Cúbranse de vergüenza y deshonra los que se engrandecen contra mí. (Salmos 35:26)
Canten de júbilo y regocíjense los que favorecen mi causa; Y digan continuamente: "Engrandecido sea el SEÑOR, Que se deleita en la paz de Su siervo." (Salmos 35:27)
Y mi lengua hablará de Tu justicia Y de Tu alabanza todo el día. (Salmos 35:28)

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Salmos 35:25 - Referencia Cruzada

Pero estaban allí sentados algunos de los escribas, los cuales pensaban en sus corazones: (Marcus 2:6)
EN DIOS CONFIA; QUE Lo LIBRE ahora SI EL LO QUIERE; porque ha dicho: 'Yo soy el Hijo de Dios.'" (Mateo 27:43)
Para el director del coro; según la tonada de "La Paloma Silenciosa de los que Están Lejos." Mictam de David cuando los Filisteos lo prendieron en Gat. Ten piedad de mí, oh Dios, porque el hombre me ha pisoteado; Me oprime combatiéndome todo el día. (Salmos 56:1)
Vivos nos hubieran tragado entonces Cuando su ira se encendió contra nosotros. (Salmos 124:3)
El enviará desde los cielos y me salvará; El reprocha al que me pisotea. (Selah) Dios enviará Su misericordia y Su verdad. (Salmos 57:3)
Dijeron en su corazón: "Arrasémoslos por completo." Han quemado todos los santuarios de Dios en la tierra. (Salmos 74:8)
El enemigo dijo: 'Perseguiré, alcanzaré, repartiré el despojo; Se cumplirá mi deseo contra ellos; Sacaré mi espada, los destruirá mi mano.' (Éxodo 15:9)
Han abierto su boca contra ti Todos tus enemigos; Silban y rechinan los dientes. Dicen: "La hemos devorado. Ciertamente éste es el día que esperábamos; Lo hemos alcanzado, lo hemos visto." (Lamentaciones 2:16)
Sean vueltos atrás por causa de su vergüenza Los que dicen: "¡Ajá, ajá!" (Salmos 70:3)
No me arrastres con los impíos Ni con los que obran iniquidad, Que hablan de paz con su prójimo, Mientras hay maldad en su corazón. (Salmos 28:3)
No me entregues a la voluntad de mis adversarios; Porque testigos falsos se han levantado contra mí, Y los que respiran violencia. (Salmos 27:12)
Al instante Jesús, conociendo en Su espíritu que pensaban de esa manera dentro de sí mismos, les dijo: "¿Por qué piensan estas cosas en sus corazones? (Marcus 2:8)
Pero cuando esto corruptible se haya vestido de incorrupción, y esto mortal se haya vestido de inmortalidad, entonces se cumplirá la palabra que está escrita: "DEVORADA HA SIDO LA MUERTE en victoria. (1 Corintios 15:54)
Yo soy de las pacíficas y fieles en Israel. Usted procura destruir una ciudad madre (importante) en Israel. ¿Por qué ha de destruir la heredad del SEÑOR?" (2 Samuel 20:19)
No concedas, SEÑOR, los deseos del impío; No hagas prosperar sus malos designios, para que no se exalten. (Selah) (Salmos 140:8)
Cuando los días del banquete habían pasado, Job enviaba a buscarlos y los santificaba, y levantándose temprano, ofrecía holocaustos conforme al número de todos ellos. Porque Job decía: "Quizá mis hijos hayan pecado y maldecido a Dios en sus corazones." Job siempre hacía así. (Job 1:5)