¿No es grande tu maldad, Y sin fin tus iniquidades?
(Job 22:5)
Porque sin razón tomabas prendas de tus hermanos, Y has despojado de sus ropas a los desnudos.
(Job 22:6)
No dabas a beber agua al cansado, Y le negabas pan al hambriento.
(Job 22:7)
Pero la tierra es del poderoso, Y el privilegiado mora en ella.
Despedías a las viudas con las manos vacías Y quebrabas los brazos de los huérfanos.
(Job 22:9)
Por eso te rodean lazos, Y te aterra temor repentino,
(Job 22:10)
O tinieblas, y no puedes ver, Y abundancia de agua te cubre.
(Job 22:11)
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Job 22:8 - Referencia Cruzada
Al capitán de cincuenta y al hombre respetable, Al consejero, al diestro artífice y al hábil encantador.
(Isaías 3:3)
Porque temí a la gran multitud, O el desprecio de las familias me aterró, Y guardé silencio y no salí de mi puerta?
(Job 31:34)
Los hombres de su ciudad, los ancianos y los nobles que vivían en su ciudad, hicieron como Jezabel les había mandado, tal como estaba escrito en las cartas que ella les había enviado.
(1 Reyes 21:11)
El anciano y venerable es la cabeza, Y el profeta que enseña la mentira, es la cola.
(Isaías 9:15)
Por todas partes se pasean los impíos, Cuando la maldad es exaltada entre los hijos de los hombres.
(Salmos 12:8)
Cuando yo salía a la puerta de la ciudad, Cuando en la plaza tomaba mi asiento,
(Job 29:7)
¿Mostrarán por El parcialidad? ¿Lucharán ustedes por Dios?
(Job 13:8)
Para el mal las dos manos son diestras. El príncipe pide, y también el juez, una recompensa, El grande habla de lo que desea su alma, Y juntos lo traman.
(Miqueas 7:3)