de los hijos de Azgad, Johanán, hijo de Hacatán, y con él 110 varones; (Esdras 8:12)

de los hijos de Adonicam, los postreros, cuyos nombres son estos: Elifelet, Jeiel y Semaías, y con ellos sesenta varones; (Esdras 8:13)

y de los hijos de Bigvai, Utai y Zabud, y con ellos setenta varones. (Esdras 8:14)

Y los reuní junto al río que corre hacia Ahava, donde acampamos tres días; y habiendo buscado entre el pueblo y los sacerdotes, no hallé ninguno de los hijos de Leví allí.

Por eso envié a llamar a Eliezer, Ariel, Semaías, Elnatán, Jarib, Elnatán, Natán, Zacarías y Mesulam, jefes, y a Joiarib y a Elnatán, hombres sabios; (Esdras 8:16)

y los envié a Iddo, jefe en la localidad de Casifia. Puse en boca de ellos las palabras que debían decir a Iddo y a sus hermanos, los sirvientes del templo en la localidad de Casifia, para que nos trajeran ministros para la casa de nuestro Dios. (Esdras 8:17)

Y conforme a la mano bondadosa de nuestro Dios sobre nosotros, nos trajeron a un hombre con entendimiento de los hijos de Mahli, hijo de Leví, hijo de Israel, es decir, a Serebías, con sus hijos y hermanos, dieciocho hombres; (Esdras 8:18)

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Esdras 8:15 - Referencia Cruzada

También algunos de los Israelitas y de los sacerdotes, Levitas, cantores, porteros y sirvientes del templo subieron a Jerusalén en el año séptimo del rey Artajerjes. (Esdras 7:7)

También les hacemos saber que no se permite cobrar tributo, impuesto o peaje a ninguno de los sacerdotes, Levitas, cantores, porteros, sirvientes, o ministros de esta casa de Dios. (Esdras 7:24)

El día de reposo salimos fuera de la puerta (de la ciudad), a la orilla de un río, donde pensábamos que habría un lugar de oración. Nos sentamos y comenzamos a hablar a las mujeres que se habían reunido. (Hechos 16:13)

Entonces vine a los desterrados de Tel Abib que habitaban junto al río Quebar, y allí donde ellos vivían, estuve sentado siete días, atónito, en medio de ellos. (Ezequiel 3:15)

En el año treinta, al quinto día del mes cuarto, estando yo entre los desterrados junto al río Quebar, los cielos se abrieron y contemplé visiones de Dios. (Ezequiel 1:1)

de los hijos de Finees, Gersón; de los hijos de Itamar, Daniel; de los hijos de David, Hatús; (Esdras 8:2)

Partimos del río Ahava el día doce del mes primero para ir a Jerusalén; y la mano de nuestro Dios estaba sobre nosotros, y nos libró de mano del enemigo y de las emboscadas en el camino. (Esdras 8:31)

Entonces proclamé allí, junto al río Ahava, un ayuno para que nos humilláramos delante de nuestro Dios a fin de implorar de El un viaje feliz para nosotros, para nuestros pequeños y para todas nuestras posesiones. (Esdras 8:21)

Junto a los ríos de Babilonia, Nos sentábamos y llorábamos Al acordarnos de Sion. (Salmos 137:1)