Nueva Biblia Latinoamericana
Porque los Amonitas y los Moabitas se levantaron contra los habitantes del Monte Seir destruyéndolos completamente, y cuando habían acabado con los habitantes de Seir, se pusieron a destruirse unos a otros. (2 Crónicas 20:23)
Cuando Judá llegó a la torre (atalaya) del desierto, miraron hacia la multitud, y sólo vieron cadáveres tendidos por tierra, ninguno había escapado. (2 Crónicas 20:24)
Al llegar Josafat y su pueblo para recoger el botín, hallaron mucho entre los cadáveres, incluyendo mercaderías, vestidos y objetos preciosos que tomaron para sí, más de los que podían llevar. Estuvieron tres días recogiendo el botín, pues había mucho. (2 Crónicas 20:25)
Al cuarto día se reunieron en el Valle de Beraca, porque allí bendijeron al SEÑOR. Por tanto llamaron aquel lugar el Valle de Beraca (de Bendición) hasta hoy.
Y todos los hombres de Judá y de Jerusalén, con Josafat al frente de ellos, regresaron a Jerusalén con alegría, porque el SEÑOR les había hecho regocijarse sobre sus enemigos. (2 Crónicas 20:27)
Entraron en Jerusalén, en la casa del SEÑOR, con arpas, liras y trompetas. (2 Crónicas 20:28)
Y vino el terror de Dios sobre todos los reinos de aquellas tierras cuando oyeron que el SEÑOR había peleado contra los enemigos de Israel. (2 Crónicas 20:29)

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2 Crónicas 20:26 - Referencia Cruzada

Y edificó Moisés un altar, y le puso por nombre El SEÑOR es mi Estandarte, (Éxodo 17:15)
A aquel lugar le puso el nombre de Betel (Casa de Dios), aunque anteriormente el nombre de la ciudad había sido Luz. (Génesis 28:19)
y dirán: 'Mire, su siervo Jacob también viene detrás de nosotros.'" Pues dijo: "Lo apaciguaré con el presente que va delante de mí. Y después veré su rostro; quizá me acepte." (Génesis 32:20)
Entonces Moisés y los Israelitas cantaron este cántico al SEÑOR, y dijeron: "Canto al SEÑOR porque ha triunfado gloriosamente (es exaltado en gran manera); Al caballo y a su jinete ha arrojado al mar. (Éxodo 15:1)
Esto llegó al conocimiento de todos los que habitaban en Jerusalén, de manera que aquel terreno se llamó en su propia lengua Acéldama, es decir, campo de sangre. (Hechos 1:19)
Pero las barras eran tan largas que los extremos de las barras del arca se podían ver delante del santuario interior, pero no se podían ver desde afuera; y allí están hasta hoy. (2 Crónicas 5:9)
Bendito sea el Señor, Dios de Israel, Porque nos ha visitado y ha traído redención para Su pueblo, (Lucas 1:68)
Entonces Samuel tomó una piedra y la colocó entre Mizpa y Sen, y la llamó Ebenezer (Piedra de Ayuda) y dijo: "Hasta aquí nos ha ayudado el SEÑOR." (1 Samuel 7:12)
Después de esto oí como una gran voz de una gran multitud en el cielo, que decía: "¡Aleluya! La salvación y la gloria y el poder pertenecen a nuestro Dios, (Apocalipsis 19:1)
Salmo de David. Bendice, alma mía, al SEÑOR, Y bendiga todo mi ser Su santo nombre. (Salmos 103:1)
Que ellos den gracias al SEÑOR por Su misericordia Y por Sus maravillas para con los hijos de los hombres. (Salmos 107:21)
David habló las palabras de este cántico al SEÑOR el día que el SEÑOR lo libró de la mano de todos sus enemigos y de la mano de Saúl. (2 Samuel 22:1)
Nunca más se dirá de ti: "Abandonada," Ni de tu tierra se dirá jamás: "Desolada;" Sino que se te llamará: "Mi deleite está en ella," Y a tu tierra: "Prometida." Porque en ti se deleita el SEÑOR, Y tu tierra tendrá esposo. (Isaías 62:4)