De Benjamín, estaba Eliada, un valiente guerrero, y con él 200,000 armados de arco y escudo;
(2 Crónicas 17:17)
y después de éste, Jozabad, y con él 180,000 armados para la guerra.
(2 Crónicas 17:18)
Estos son los que sirvieron al rey, sin contar los que el rey puso en las ciudades fortificadas por todo Judá.
(2 Crónicas 17:19)
Josafat tenía grandes riquezas y gloria; se emparentó con Acab.
Algunos años después descendió a Samaria para visitar a Acab. Y Acab mató muchas ovejas y bueyes para él y para el pueblo que estaba con él, y lo persuadió a que subiera con él contra Ramot de Galaad.
(2 Crónicas 18:2)
Acab, rey de Israel, le preguntó a Josafat, rey de Judá: "¿Irás conmigo contra Ramot de Galaad?" Y Josafat le respondió: "Yo soy como tú, y mi pueblo como tu pueblo; estaremos contigo en la batalla."
(2 Crónicas 18:3)
Dijo además Josafat al rey de Israel: "Te ruego que primero consultes la palabra del SEÑOR."
(2 Crónicas 18:4)
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2 Crónicas 18:1 - Referencia Cruzada
Cuando los capitanes de los carros vieron a Josafat, dijeron: "Este es el rey de Israel;" y se desviaron para pelear contra él. Pero Josafat clamó, y el SEÑOR vino en su ayuda, y Dios los apartó de él,
(2 Crónicas 18:31)
Como si fuera poco el andar en los pecados de Jeroboam, hijo de Nabat, tomó por mujer a Jezabel, hija de Et Baal, rey de los Sidonios, y fue a servir a Baal y lo adoró.
(1 Reyes 16:31)
Y dijo Dios a Salomón: "Por cuanto esto estaba en tu corazón, y no has pedido riquezas, ni bienes, ni gloria, ni la vida de los que te odian, ni aun has pedido larga vida, sino que has pedido para ti sabiduría y conocimiento para poder gobernar a Mi pueblo sobre el cual te he hecho rey,
(2 Crónicas 1:11)
Y anduvo en el camino de los reyes de Israel, tal como había hecho la casa de Acab (porque la hija de Acab era su mujer); e hizo lo malo ante los ojos del SEÑOR.
(2 Reyes 8:18)
Pero busquen primero Su reino y Su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas.
(Mateo 6:33)
El SEÑOR, pues, afirmó el reino bajo su mano; y todo Judá le traía presentes a Josafat, y tuvo grandes riquezas y honores.
(2 Crónicas 17:5)
Ciertamente no hubo nadie como Acab que se vendiera para hacer lo malo ante los ojos del SEÑOR, porque Jezabel su mujer lo había convencido.
(1 Reyes 21:25)
Y anduvo en el camino de los reyes de Israel, tal como había hecho la casa de Acab (pues la hija de Acab era su mujer), e hizo lo malo ante los ojos del SEÑOR.
(2 Crónicas 21:6)
Josafat se engrandecía más y más, y edificó fortalezas y ciudades de almacenaje en Judá.
(2 Crónicas 17:12)
Pero el vidente Jehú, hijo de Hananí, salió a encontrarlo y dijo al rey Josafat: "¿Vas a ayudar al impío y amar a los que odian al SEÑOR, y con esto traer sobre ti la ira del SEÑOR?
(2 Crónicas 19:2)
No estén unidos en yugo desigual con los incrédulos, pues ¿qué asociación tienen la justicia y la iniquidad? ¿O qué comunión la luz con las tinieblas?
(2 Corintios 6:14)
Ocozías tenía veintidós años cuando comenzó a reinar, y reinó un año en Jerusalén. El nombre de su madre era Atalía, nieta de Omri.
(2 Crónicas 22:2)
Ocozías tenía veintidós años cuando comenzó a reinar, y reinó un año en Jerusalén. El nombre de su madre era Atalía, nieta de Omri, rey de Israel.
(2 Reyes 8:26)
Cuando Atalía, madre de Ocozías, vio que su hijo había muerto, se levantó y exterminó a toda la descendencia real.
(2 Reyes 11:1)