La estrategia evangelística de Pablo
Dr. Roberto Miranda
(Audio: Español)
RESUMEN: El pasaje se encuentra en el libro de los Hechos, capítulo 13, y relata el primer sermón evangelístico de Pablo en su primer viaje misionero. Llega a Antioquía de Pisidia y entra en una sinagoga, que era como una iglesia judía en todas partes del mundo donde los judíos estaban esparcidos. Para establecer una sinagoga se requerían 10 hombres judíos en la comunidad. Pablo y Bernabé van a la sinagoga en un día de reposo, que era el sábado, porque todavía seguían en el reloj antiguo y la iglesia cristiana no había comenzado a reunirse los domingos. Este pasaje es importante para aprender sobre la historia de Israel y la iglesia cristiana y para ver cómo Pablo presenta el Evangelio y lleva a la Congregación de judíos a donde él quiere que lleguen.
En este pasaje de Hechos 13, Pablo y Bernabé llegan a una sinagoga y son invitados a hablar. En las sinagogas, se leían porciones de la ley y los profetas, y era costumbre dar oportunidad a los visitantes para que hablaran. Pablo habla a los varones israelitas y a los que temen a Dios (los gentiles que estaban interesados en el judaísmo). Él les hace un recuento de la historia de los judíos, incluyendo la elección de David como rey. A pesar de que David cometió graves errores en su vida, Dios lo consideró un hombre conforme a su corazón. El trabajo pastoral implica amar, perdonar, tolerar y aconsejar a las personas a pesar de sus errores y fallas.
En este sermón, el pastor habla sobre la importancia de tener un corazón tierno y arrepentido ante Dios. A través de la historia de David, un hombre que cometió pecados terribles, pero que amaba a Dios y se arrepentía, se muestra que Dios busca personas que lo amen y reconozcan sus errores. También se destaca la importancia de presentar a Jesús como la culminación de la historia y de usar la propia vida y la cultura de las personas para compartir el Evangelio. Finalmente, se hace un llamado a prepararse y entrenarse en la palabra de Dios para ser un propagador efectivo del Evangelio.
El predicador habla sobre la elección entre seguir a Cristo o al diablo y hace un llamado para que aquellos que no han recibido a Jesús como su Señor y Salvador lo hagan. También anima a la congregación a comprometerse a predicar el Evangelio y a ser radicales en su fe para transformar su comunidad. Termina orando por la iglesia para que se convierta en una comunidad evangelística que anuncie la palabra de Dios y traiga a los inconversos a Cristo.
En este pasaje de Hechos 13, Pablo y Bernabé llegan a una sinagoga y son invitados a hablar. En las sinagogas, se leían porciones de la ley y los profetas, y era costumbre dar oportunidad a los visitantes para que hablaran. Pablo habla a los varones israelitas y a los que temen a Dios (los gentiles que estaban interesados en el judaísmo). Él les hace un recuento de la historia de los judíos, incluyendo la elección de David como rey. A pesar de que David cometió graves errores en su vida, Dios lo consideró un hombre conforme a su corazón. El trabajo pastoral implica amar, perdonar, tolerar y aconsejar a las personas a pesar de sus errores y fallas.
En este sermón, el pastor habla sobre la importancia de tener un corazón tierno y arrepentido ante Dios. A través de la historia de David, un hombre que cometió pecados terribles, pero que amaba a Dios y se arrepentía, se muestra que Dios busca personas que lo amen y reconozcan sus errores. También se destaca la importancia de presentar a Jesús como la culminación de la historia y de usar la propia vida y la cultura de las personas para compartir el Evangelio. Finalmente, se hace un llamado a prepararse y entrenarse en la palabra de Dios para ser un propagador efectivo del Evangelio.
El predicador habla sobre la elección entre seguir a Cristo o al diablo y hace un llamado para que aquellos que no han recibido a Jesús como su Señor y Salvador lo hagan. También anima a la congregación a comprometerse a predicar el Evangelio y a ser radicales en su fe para transformar su comunidad. Termina orando por la iglesia para que se convierta en una comunidad evangelística que anuncie la palabra de Dios y traiga a los inconversos a Cristo.
Vamos a la palabra del Señor en el libro de los Hechos, en el Capítulo 13, vamos a ir al versículo 13. Es un pasaje bien largo y por lo tanto simplemente si lo pueden poner en la pantalla, se lo agradezco a los hermanos, usted puede ir leyéndolo poco a poco y yo voy a relatarlo con ustedes y vamos a discutir algunos puntos específicos, y váyalo leyendo conmigo si tiene su Biblia y espero que tenga su Biblia para que usted pueda leer conmigo.
Este es le primer sermón que Pablo predica a una Congregación en su primer viaje misionero. Hace 3 domingos atrás o algo así, vimos a Pablo predicando ante un hombre romano, un alto oficial romano y vimos allí la oposición de este mago, Elimas, también conocido como Barjesús, como un nombre así tenía que ser malo, Barjesús. Y la oposición ocultista de este hombre que quería impedir que este alto oficial romano que podía ser de tanta bendición recibiera la palabra de Dios y vimos como Pablo, lleno del Espíritu Santo lo reprendió, declaró juicio sobre él. Sabe que hay tiempos para juicio y hay tiempo en que la iglesia de Jesucristo no es simplemente simpática, y buena y bonachona, y atractiva y agradable a la gente. A veces la iglesia de Jesucristo tiene también que declarar juicio y abrir también los juicios de Dios sobre una persona o aún sobre una sociedad completa. Y Pablo esencialmente lo maldijo en el nombre del Señor, lo reprendió y declaró que iba a quedar ciego por un tiempo. Y cerró la puerta del demonio que quiere impedir que la gente escuche la verdad.
Este es le primer sermón que Pablo predica a una Congregación en su primer viaje misionero. Hace 3 domingos atrás o algo así, vimos a Pablo predicando ante un hombre romano, un alto oficial romano y vimos allí la oposición de este mago, Elimas, también conocido como Barjesús, como un nombre así tenía que ser malo, Barjesús. Y la oposición ocultista de este hombre que quería impedir que este alto oficial romano que podía ser de tanta bendición recibiera la palabra de Dios y vimos como Pablo, lleno del Espíritu Santo lo reprendió, declaró juicio sobre él. Sabe que hay tiempos para juicio y hay tiempo en que la iglesia de Jesucristo no es simplemente simpática, y buena y bonachona, y atractiva y agradable a la gente. A veces la iglesia de Jesucristo tiene también que declarar juicio y abrir también los juicios de Dios sobre una persona o aún sobre una sociedad completa. Y Pablo esencialmente lo maldijo en el nombre del Señor, lo reprendió y declaró que iba a quedar ciego por un tiempo. Y cerró la puerta del demonio que quiere impedir que la gente escuche la verdad.
