Isaías 40

(Audio: Spanish, English) ->Original

SUMMARY: El predicador habla acerca de cuatro voces para edificar el Reino de Dios, basado en Isaías 40:1-12. La primera voz es de consolación y restauración, Dios quiere dar una doble porción de su Espíritu y restaurar familias. La segunda voz es de preparación, Dios quiere que preparemos el camino del Señor y derribemos fortalezas del enemigo en la ciudad. La tercera voz es de manifestación de la gloria de Dios, que será vista por todos. Y la cuarta voz es de pastoreo, Dios pastoreará su rebaño y llevará a los corderos en su brazo. El predicador comparte su propio testimonio de seguir el llamado de Dios a la República Dominicana y cómo ha sido un camino difícil pero victorioso.

Este sermón habla de las cuatro voces que Dios está usando para construir su reino: la voz de la consolación, la voz de la esperanza, la voz de la reforma y la voz de reunir las ovejas. El pastor habla sobre cómo Dios quiere restaurar a su pueblo y traer esperanza en medio de las tribulaciones. También habla sobre cómo la palabra de Dios tiene poder para reformar la sociedad y sujetarla al señorío de Cristo. Finalmente, habla sobre la importancia de reunir las ovejas y traer salvación a la familia y amigos. El pastor anima a los miembros de la iglesia a prepararse para recibir el discipulamiento que Dios quiere traer y ser usados como vehículos de restauración y reforma en la sociedad.

Quiero dar una bienvenida especial a mi hermano Jim Jorgensen que como suena su nombre no es un latino necesariamente, pero de corazón si es latino.

Jim, pasa por acá. Jim ha sido misionero en la República Dominicana y mi sobrino Johnny que es pastor allá en República Dominicana me lo ha recomendado altamente. Jim ha tenido un ministerio fructífero allí en República Dominicana y es un siervo de Dios que se mueve en el don profético, estuvo varios años con su esposa, que es profesora en una universidad aquí en Albany. Vino este fin de semana a Boston porque su hija comienza su carrera universitaria aquí en Boston. Así que lo hemos invitado para que comparta la palabra del Señor, el ministerio que el Señor le ha dado con nosotros.