¿Cómo será esto? (Parte 2)
Dr. Roberto Miranda(Audio: Español)
RESUMEN:
En este sermón, el pastor se enfoca en la pregunta que hace María cuando el ángel le anuncia que va a ser madre del Mesías. María pregunta "¿Cómo será esto?" y el pastor destaca la importancia de esta pregunta, ya que cuando Dios anuncia algo en nuestras vidas, es común que surjan preguntas y dudas. El pastor compara la pregunta de María con la de Zacarías, quien pregunta con incredulidad. El pastor resalta la importancia de adoptar una mentalidad de fe y creer que Dios puede hacer milagros en nuestras vidas, incluso si parecen imposibles. El pastor da algunas sugerencias sobre cómo reaccionar cuando Dios anuncia algo en nuestras vidas, incluyendo discernir si viene de Dios, adoptar una actitud de acción y trabajar con Dios para llevar a cabo su plan.
Para discernir si un impulso o inquietud viene de Dios, es necesario preguntarse si está de acuerdo con la palabra de Dios, si glorifica a Dios o a uno mismo, si coincide con debilidades o cualidades de carácter, si resiste la oración, la consulta con gente sabia y madura, y el paso del tiempo, y si obedece a los patrones milagrosos de la palabra de Dios. Además, no se debe detener en lo difícil del asunto, sino confiar en que Dios tiene la solución y continuar dando pasos de fe aunque la duda y la oposición surjan.
El proceso de recibir un milagro de Dios incluye discernimiento, oración, esfuerzo, espera y declaración. Es importante discernir si el milagro viene de Dios, orar para que se complete, hacer nuestra parte para contribuir al milagro, bañarlo en oración y, finalmente, declararlo con nuestra boca. También debemos confiar en Dios y no dejarnos dominar por el miedo o la oposición. Si seguimos estos pasos, podemos recibir el milagro de Dios en nuestras vidas.
El pastor habla sobre cómo esperar en el Señor para recibir milagros. Se debe discernir, orar, consultar, discernir, pagar el precio y hacer nuestra parte para que el milagro ocurra. Si aún no ocurre, debemos declararlo en el nombre de Jesús y esperar pacientemente, recordando que Dios se toma su tiempo. La visión puede tardar, pero se apresura hacia el fin y no mentirá. Debemos escribir la visión y confesarla con nuestra boca. Dios quiere una vida fructífera para nosotros y nos bendecirá si creemos en Él.Yo quiero concluir el estudio que inicié la semana pasada, o la meditación y recordarán que la meditación la fundamentamos en una pregunta que hizo María cuando el ángel Gabriel le anuncia que va a ser madre y que el ser que va a nacer de su vida va a ser llamado Hijo del Altísimo que es un ser maravilloso que Dios ha escogido para sanidad de la humanidad, el Mesías prometido. Y María hace una pregunta clave y dice, ¿Cómo será esto? ¿Qué va a pasar? ¿Cómo se va a dar esto?
Ahí en el versículo 31, Lucas 1:31 el ángel le dice, “… y ahora concebirás en tu vientre y darás a luz un hijo, llamarás su nombre Jesús, este será grande, será llamado Hijo del Altísimo y el Señor Dios le dará el trono de David, su padre,….” Y le dice una serie de cosas maravillosas que van a surgir de la vida de ese ser sobrenatural. “… Reinará sobre la casa de Jacob, su reino no tendrá fin…”