Dios habla hoy viernes, 2 de agosto 2024

El temor del SEÑOR es aborrecer el mal. El orgullo, la arrogancia, el mal camino Y la boca perversa, yo aborrezco. (Proverbios 8:13)
Yo les he dado Tu palabra y el mundo los ha odiado, porque no son del mundo, como tampoco Yo soy del mundo. (Juan 17:14)
Faustino de Jesús Zamora Vargas

Imitando a Cristo - por amor al mundo

El cristiano no debe sorprenderse si el mundo le aborrece, ya que la Palabra de Dios que hemos recibido nos separa del mundo y nos transforma. Sin embargo, aunque no somos del mundo, hemos sido enviados al mundo para cumplir una misión gloriosa. Cuando la Biblia habla del mundo, se refiere a las fuerzas espirituales que nos alejan de la voluntad de Dios. Aunque nos parezca increíble, nuestra ciudadanía está en el cielo gracias a la sangre de Cristo. Debemos ser luz en un mundo velado por las tinieblas y amar a las personas como Dios las ama. El desafío es vivir en el mundo pero no ser parte de él, rechazando las fuerzas opuestas al reino de Dios y dando palabra de vida eterna al mundo. Jesús prometió estar con nosotros siempre. Leer más...


Referencia Cruzada

Los que aman al SEÑOR, aborrezcan el mal; El guarda las almas de Sus santos; Los libra de la mano de los impíos. (Salmos 97:10)
Con misericordia y verdad se expía la culpa, Y con el temor del SEÑOR el hombre se aparta del mal. (Proverbios 16:6)
Si el mundo los odia, sepan que Me ha odiado a Mí antes que a ustedes. (Juan 15:18)
Absténganse de toda forma (apariencia) de mal. (1 Tesalonicenses 5:22)

Comentarios:

Enrique Meneses Muñoz : Me bendice y fortalece esta palabra mi SEÑOR.
¡Qué hermoso comentario, Enrique! Es maravilloso recibir bendiciones y fortaleza a través de la Palabra del Señor. Como menciona Faustino de Jesús Zamora Vargas en su devocional, al recibir la Palabra de Dios en nuestras vidas y reflejarla en nuestra forma de vivir, es normal encontrarnos en situaciones donde el mundo nos rechace. Sin embargo, recordemos que no pertenecemos a este mundo, sino que hemos sido separados para la gloria de Dios. Mantengamos firme nuestra fe y sigamos imitando a Cristo, compartiendo Su amor y verdad con aquellos que nos rodean. ¡Dios te bendiga, Enrique!
Ruth Vives.: Si las cosas y asuntos del mundo no están alineadas a las doctrinas del evangelio de Dios. El buen cristiano debe renunciar a estas. Dios les Bendiga. Amen.
¡Qué reflexión tan acertada, Ruth! Como mencionas, es fundamental para un buen cristiano discernir entre lo que el mundo ofrece y lo que las doctrinas del evangelio nos enseñan. Tal como expresa Faustino de Jesús Zamora Vargas en su devocional, aunque estemos en este mundo, no somos de él, y debemos separarnos de todo aquello que va en contra de la voluntad de Dios. Que la sabiduría del Espíritu Santo nos guíe para tomar decisiones alineadas con la Palabra de Dios. ¡Dios te bendiga, Ruth! Amen.
Yda Urrutia : Amén. Gloria a Dios por ser sus hijos Gracias al Espíritu Santo que siempre nos redargulle y nos revela la verdad. Bendiciones mis hermanos en Cristo.
¡Amén, Yda! Es maravilloso glorificar a Dios por el privilegio de ser sus hijos y por la guía constante del Espíritu Santo en nuestras vidas. Como menciona Faustino de Jesús Zamora Vargas, el Espíritu Santo nos redarguye y nos revela la verdad para ayudarnos a separarnos de las fuerzas opuestas al reino de Dios. Que sigamos siendo sensibles a Su voz y permitamos que Él nos conduzca en todos nuestros caminos. ¡Que las bendiciones del Señor estén sobre ti y todos tus hermanos en Cristo, Yda!
Betty Casanova : Tenemos que aprender con madurez firme, que el verdadero ciudadano del Reino no pertenece a este mundo, por lo tanto el dominio propio tiene y debe de estar firme en la Roca, que es Cristo.
¡Qué comentario tan acertado, Betty! Es fundamental reconocer que como ciudadanos del Reino de Dios, nuestra identidad y pertenencia no son de este mundo. Tal como menciona Faustino de Jesús Zamora Vargas, debemos tener firmeza en nuestra fe y en Cristo, la Roca sobre la cual edificamos nuestra vida espiritual. El dominio propio y la madurez en la fe nos ayudarán a mantenernos firmes en medio de las adversidades y a vivir de acuerdo a los principios del Reino de Dios. Que la fortaleza de Cristo sea nuestra seguridad en todo momento. ¡Dios te bendiga, Betty!