Dios habla hoy jueves, 1 de febrero 2024

Yo, el SEÑOR, escudriño el corazón, Pruebo los pensamientos, Para dar a cada uno según sus caminos, Según el fruto de sus obras. (Jeremías 17:10)
Pero tú, cuando des limosna, que no sepa tu mano izquierda lo que hace tu derecha, (Mateo 6:3)
Charles Spurgeon

Dar como un asunto de rutina

No hagas caridad para ser visto por los demás, hazlo en secreto y sin esperar recompensa. Dios recompensará a aquellos que lo hacen en secreto. Esto es un lujo exquisito y el Señor recompensará al dador secreto de limosnas a Su manera y a Su tiempo. Leer más...


Referencia Cruzada

El es grande en consejo y poderoso en obras, cuyos ojos están abiertos sobre todos los caminos de los hijos de los hombres, para dar a cada uno conforme a sus caminos y conforme al fruto de sus obras. (Jeremías 32:19)
Y Aquél que escudriña los corazones sabe cuál es el sentir del Espíritu, porque El intercede por los santos conforme a la voluntad de Dios. (Romanos 8:27)
Pero, oh SEÑOR de los ejércitos, que juzgas rectamente, Que examinas los sentimientos y el corazón, Vea yo Tu venganza contra ellos, Porque a Ti he expuesto mi causa. (Jeremías 11:20)
Pero el SEÑOR dijo a Samuel: "No mires a su apariencia, ni a lo alto de su estatura, porque lo he desechado; porque Dios no ve como el hombre ve, pues el hombre mira la apariencia exterior, pero el SEÑOR mira el corazón." (1 Samuel 16:7)

Comentarios:

Enrique Meneses Muñoz : Necesito el privilegio de dar para tu Reino SEÑOR.
Enrique, es maravilloso que desees tener el privilegio de dar para el Reino de Dios. En el devocional de Charles Spurgeon que compartiste, él nos anima a dar en secreto, sin buscar reconocimiento o recompensa de los hombres. En Mateo 6:3, Jesús nos enseña: "Pero tú, cuando des limosna, que no sepa tu mano izquierda lo que hace tu derecha". Esto nos muestra la importancia de dar sin alardear, de manera humilde y sincera. Spurgeon nos recuerda que cuando damos en secreto, encontramos un gozo especial en nuestras acciones generosas, y que el Señor mismo ve y recompensa al dador secreto de limosnas. Él nos anima a hacer de la generosidad una rutina en nuestra vida, como algo natural y constante. Entonces, Enrique, te animo a buscar oportunidades para dar en secreto, sin buscar reconocimiento o recompensa de los hombres, sino con un corazón sincero y generoso hacia el Reino de Dios. Recuerda que el Señor escudriña nuestros corazones y prueba nuestros pensamientos, y nos dará según nuestros caminos y el fruto de nuestras obras, como nos dice Jeremías 17:10. Que el Señor te bendiga en tu deseo de dar para Su Reino.
Elkin Melo: Un corazón Generoso y Bondadoso alegra el Alma de los demás (quien recibe), y es una de tantas maneras de reflejar la esencia de nuestro Dios y Padre Celestial.
¡Hola Elkin! Tienes toda la razón. Un corazón generoso y bondadoso no solo beneficia a quienes reciben, sino que también alegra nuestras propias almas. Cuando somos generosos, reflejamos la esencia de nuestro Dios y Padre Celestial, quien es el modelo supremo de generosidad. En el devocional de Charles Spurgeon que compartimos, él nos anima a dar de manera rutinaria y en secreto, sin buscar reconocimiento. Cuando damos con un corazón generoso, estamos imitando a nuestro Padre Celestial y mostrando su amor al mundo. Él es la fuente de toda generosidad y bondad, y cuando reflejamos esas cualidades, estamos compartiendo su amor con aquellos que nos rodean. En este sentido, la generosidad no solo impacta positivamente a quienes reciben, sino que también nos transforma a nosotros mismos. Al dar de manera desinteresada, experimentamos una alegría especial y una conexión más profunda con el corazón de Dios. Así que, Elkin, te animo a seguir cultivando un corazón generoso y bondadoso, buscando oportunidades para bendecir a los demás de manera discreta y sincera. Que tu generosidad sea un reflejo del amor de nuestro Dios y una fuente de alegría para aquellos que reciben. Que Dios te bendiga en tu deseo de ser un instrumento de su amor y generosidad.
Francisco Diaz S.: El hombre que es duro de corazón no se conmueve ante el sufrimiento ajeno, pero tampoco recibirá ayuda de nadie cuando se encuentra en dificultades. Uno nunca sabe cuando va a tener que valerse de la buena voluntad de los demás.
Hola Francisco. Tienes toda la razón en tu comentario. Cuando nuestro corazón es duro y insensible hacia el sufrimiento ajeno, es difícil que podamos recibir ayuda y compasión de otros cuando nosotros mismos estamos en dificultades. En el devocional de Charles Spurgeon que compartimos, él nos anima a dar en secreto y sin buscar recompensas o reconocimiento. Esto se debe a que la generosidad y la compasión son actitudes que deben fluir naturalmente de un corazón sensible y dispuesto a ayudar a los demás. Es importante recordar que nadie está exento de enfrentar dificultades en algún momento de la vida. Por eso, es fundamental cultivar un corazón generoso y compasivo, no solo para beneficiar a quienes nos rodean, sino también para estar abiertos a recibir ayuda cuando nosotros mismos la necesitemos. La generosidad y la compasión son características que nos acercan a la esencia de nuestro Dios y Padre Celestial, quien es el modelo supremo de amor y bondad. Al reflejar esas cualidades en nuestras vidas, estamos mostrando el amor y la gracia de Dios a los demás. Así que, Francisco, te animo a mantener tu corazón sensible y generoso, dispuesto a ayudar y comprender a quienes te rodean. Recuerda que la buena voluntad y la compasión que mostramos hacia los demás pueden ser el puente para recibir ayuda cuando nosotros mismos la necesitemos. Que Dios te bendiga y te dé un corazón lleno de amor y compasión.
Francisco Diaz S.: Quien cultiva misericordia misericordia recibe, Dios premia al dador desinteresado.
¡Hola Francisco! Gracias por tu comentario. Tienes toda la razón al decir que quien cultiva la misericordia, también recibe misericordia. En el devocional de Charles Spurgeon que compartimos, él nos exhorta a dar en secreto y sin buscar recompensas, confiando en que Dios mismo recompensará al dador desinteresado. Nuestro Dios es un Dios de amor y misericordia, y Él ve nuestras acciones generosas y desinteresadas. En la Biblia, encontramos en Mateo 5:7 que Jesús dice: "Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia". Esto nos muestra que cuando mostramos misericordia y compasión hacia los demás, Dios se complace y también nos muestra su misericordia. Es importante recordar que la recompensa que recibimos por nuestras acciones generosas no siempre tiene que ser material o tangible. A veces, la recompensa se encuentra en el gozo y la satisfacción que sentimos al ayudar a quienes nos rodean, y en el amor y la gratitud que recibimos de aquellos a quienes hemos bendecido. Así que, Francisco, sigue cultivando la misericordia en tu vida, buscando oportunidades para mostrar amor y compasión a quienes te rodean. Confía en que Dios recompensará tu generosidad, ya sea de una manera visible o a través del gozo y la paz en tu corazón. Que el Señor te bendiga en tu deseo de ser un dador desinteresado y misericordioso.
Moises Mora : Haz el bien sin mirar a quien, hacerlo por amor a este tiempo difícil, y expresarles quien es nuestro proveedor y a quien nos debemos en este tiempo de amor.
¡Hola Moisés! Gracias por tu comentario. Tienes una perspectiva muy acertada. En estos tiempos difíciles, es fundamental hacer el bien sin importar a quién. Al hacerlo, mostramos amor y compasión hacia los demás, y también compartimos quién es nuestro proveedor y a quién nos debemos. En el devocional de Charles Spurgeon que compartimos, él nos anima a dar en secreto y sin buscar reconocimiento, confiando en que Dios ve nuestras acciones generosas. Al hacer el bien por amor a los demás en estos tiempos difíciles, estamos reflejando el amor de Dios y mostrando nuestra dependencia de Él como nuestro proveedor. Es importante recordar que el amor y la ayuda que brindamos a los demás no solo beneficia a quienes reciben, sino que también nos conecta más profundamente con la esencia de nuestro Dios y nos da un propósito en medio de las dificultades. Así que, Moisés, te animo a seguir haciendo el bien sin mirar a quién, sin importar las circunstancias. Que tu generosidad y tus acciones de amor sean un testimonio vivo de quién es nuestro proveedor y a quién nos debemos. Que Dios te bendiga en tu deseo de ser una luz y un instrumento de ayuda en este tiempo de amor.
César Fuentes : Es maravilloso recibir a diario la palabra y reflexionar en ella. Lo que me preocupa es que hoy no llego. Gracias por ser instrumento del SEÑOR. Bendiciones
¡Hola César! Me alegra que encuentres maravilloso recibir diariamente la palabra y reflexionar en ella. A veces, puede ser difícil cuando no llega en el momento esperado, pero no te preocupes, estoy aquí para ser un instrumento del SEÑOR y ayudarte en lo que necesites. Recuerda que la palabra de Dios está siempre disponible para ti. Puedes buscarla en la Biblia, leer devocionales como el de Charles Spurgeon que compartimos, o incluso encontrar recursos en línea que te permitan acceder a la palabra de Dios en cualquier momento. Agradezco tus palabras y me siento honrado de poder ser un instrumento en tu camino espiritual. Como facilitador, mi objetivo principal es ayudar y brindar apoyo a aquellos que buscan la palabra de Dios y reflexionan sobre ella. Que el SEÑOR te bendiga abundantemente en tu búsqueda diaria de su palabra y que encuentres inspiración y guía en ella. Si tienes alguna pregunta o necesitas alguna otra reflexión, no dudes en pedirlo. Estoy aquí para servirte. ¡Bendiciones!
Jose : Hola mis hermanos que Dios los sigan bendiciendo grande mente me es UN placer saludorlos e Sido muy bendecido al leer todos los mensajes queme envian le saludos aka en Washington que la paz y El amor de Dios los siga fortaleciendo a cada uno de Los que escriven los mensajes de amor bendiciones
¡Hola José! Agradecemos tus palabras y nos alegra saber que has sido bendecido al leer los mensajes que compartimos. Es un privilegio poder ser instrumentos de Dios para transmitir su amor y su bendición a través de nuestras palabras. Desde Washington, te enviamos un saludo fraterno y deseamos que la paz y el amor de Dios continúen fortaleciéndote en tu caminar espiritual. Que su gracia y su misericordia te acompañen cada día y te llenen de gozo y esperanza. Recuerda que estamos aquí para apoyarte y brindarte recursos y reflexiones basadas en la palabra de Dios. Si hay algo en particular en lo que podamos ayudarte, no dudes en hacérnoslo saber. Que Dios te siga bendiciendo grandemente y que su amor inunde tu vida. ¡Bendiciones abundantes para ti y para todos los que nos acompañan en esta comunidad!