Y consintieron los sacerdotes en no tomar más dinero del pueblo, ni reparar ellos los daños de la casa.
(2 Reyes 12:8)Entonces el sacerdote Joiada tomó un cofre e hizo un agujero en la tapa, y lo puso junto al altar, al lado derecho conforme se entra a la casa del SEÑOR; y los sacerdotes que custodiaban el umbral depositaban en él todo el dinero que se traía a la casa del SEÑOR.
(2 Reyes 12:9)Cuando veían que había mucho dinero en el cofre, el escriba del rey y el sumo sacerdote subían y lo ponían en sacos, y contaban el dinero que se encontraba en la casa del SEÑOR.
(2 Reyes 12:10)Y entregaban el dinero que había sido contado en manos de los que hacían el trabajo, los cuales tenían a su cargo la casa del SEÑOR, y ellos lo traían para pagar a los carpinteros y a los constructores que trabajaban en la casa del SEÑOR,
y a los albañiles y canteros, y para comprar madera y piedra de cantería para reparar los daños de la casa del SEÑOR, y para todo lo que se gastaba para la casa, a fin de repararla.
(2 Reyes 12:12)Pero del dinero que se traía a la casa del SEÑOR, no se hicieron ni copas de plata, ni despabiladeras, ni tazones, ni trompetas, ni ninguna vasija de oro, ni vasijas de plata para la casa del SEÑOR;
(2 Reyes 12:13)porque lo daban a los que hacían el trabajo, y con él reparaban la casa del SEÑOR.
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2 Reyes 12:11 - Referencia Cruzada
Y sucedía que siempre que el cofre era traído al oficial del rey por los Levitas, y cuando veían que había mucho dinero, entonces el escriba del rey y el oficial del sumo sacerdote venían, vaciaban el cofre, lo tomaban y lo volvían a su lugar. Así hacían diariamente y recogían mucho dinero.
(2 Crónicas 24:11)y que lo pongan en mano de los obreros encargados de supervisar la casa del SEÑOR, y que ellos lo den a los obreros que están asignados en la casa del SEÑOR para reparar los daños de la casa,
(2 Reyes 22:5)Ellos vinieron al sumo sacerdote Hilcías y le entregaron el dinero que había sido traído a la casa de Dios, y que los Levitas guardianes del umbral habían recogido de Manasés y de Efraín y de todo el remanente de Israel, y de todo Judá y Benjamín y de los habitantes de Jerusalén.
(2 Crónicas 34:9)