Entonces el rey Joás llamó al sacerdote Joiada y a los otros sacerdotes, y les dijo: "¿Por qué no reparan los daños de la casa? Ahora pues, no tomen más dinero de sus conocidos, sino entréguenlo para los daños de la casa."
(2 Reyes 12:7)Y consintieron los sacerdotes en no tomar más dinero del pueblo, ni reparar ellos los daños de la casa.
(2 Reyes 12:8)Entonces el sacerdote Joiada tomó un cofre e hizo un agujero en la tapa, y lo puso junto al altar, al lado derecho conforme se entra a la casa del SEÑOR; y los sacerdotes que custodiaban el umbral depositaban en él todo el dinero que se traía a la casa del SEÑOR.
(2 Reyes 12:9)Cuando veían que había mucho dinero en el cofre, el escriba del rey y el sumo sacerdote subían y lo ponían en sacos, y contaban el dinero que se encontraba en la casa del SEÑOR.
Y entregaban el dinero que había sido contado en manos de los que hacían el trabajo, los cuales tenían a su cargo la casa del SEÑOR, y ellos lo traían para pagar a los carpinteros y a los constructores que trabajaban en la casa del SEÑOR,
(2 Reyes 12:11)y a los albañiles y canteros, y para comprar madera y piedra de cantería para reparar los daños de la casa del SEÑOR, y para todo lo que se gastaba para la casa, a fin de repararla.
(2 Reyes 12:12)Pero del dinero que se traía a la casa del SEÑOR, no se hicieron ni copas de plata, ni despabiladeras, ni tazones, ni trompetas, ni ninguna vasija de oro, ni vasijas de plata para la casa del SEÑOR;
(2 Reyes 12:13)Otras publicaciones relacionadas con "2 Reyes 12:10":
2 Reyes 12:10 - Referencia Cruzada
Sadoc, hijo de Ahitob, y Ahimelec, hijo de Abiatar, eran sacerdotes, y Seraías era secretario;
(2 Samuel 8:17)Entonces el rey ordenó al sacerdote Hilcías, a Ahicam, hijo de Safán, a Acbor, hijo de Micaías, al escriba Safán y a Asaías, siervo del rey:
(2 Reyes 22:12)Y Naamán dijo: "Dígnate aceptar 64 kilos." Y le insistió y ató 64 kilos de plata en dos bolsas con dos mudas de ropa, y los entregó a dos de sus criados; y éstos los llevaron delante de Giezi.
(2 Reyes 5:23)Envió entonces a Eliaquim, mayordomo de la casa real, con el escriba Sebna y los ancianos de los sacerdotes, cubiertos de cilicio, para hablar con el profeta Isaías, hijo de Amoz.
(2 Reyes 19:2)Y en el año dieciocho del rey Josías, el rey envió al escriba Safán, hijo de Azalía, de Mesulam, a la casa del SEÑOR, diciéndole:
(2 Reyes 22:3)