Nueva Biblia Latinoamericana
Y le echaron mano; y cuando ella llegó a la entrada de los caballos de la casa del rey, allí la mataron. (2 Reyes 11:16)
Entonces Joiada hizo un pacto entre el SEÑOR y el rey y el pueblo, de que ellos serían el pueblo del SEÑOR; asimismo entre el rey y el pueblo. (2 Reyes 11:17)
Y todo el pueblo del país fue a la casa de Baal y la derribaron, destruyeron completamente sus altares y sus imágenes y mataron delante de los altares a Matán, sacerdote de Baal. Y el sacerdote nombró oficiales sobre la casa del SEÑOR. (2 Reyes 11:18)
Tomó a los capitanes de centenas, a los Cariteos, a los guardias y a todo el pueblo del país, e hicieron descender al rey de la casa del SEÑOR, y vinieron por el camino de la puerta de los guardias a la casa del rey, y Joás se sentó en el trono de los reyes.
Y todo el pueblo del país se regocijó, y la ciudad quedó tranquila, porque Atalía había sido muerta a espada en la casa del rey. (2 Reyes 11:20)
Joás tenía siete años cuando comenzó a reinar. (2 Reyes 11:21)
En el séptimo año de Jehú, Joás comenzó a reinar, y reinó cuarenta años en Jerusalén; y el nombre de su madre era Sibia de Beerseba. (2 Reyes 12:1)

Otras publicaciones relacionadas con "2 Reyes 11:19":

Dr. Roberto Miranda
De la crisis a la bendición
El autor, Dr. Roberto Miranda, habla sobre cómo el capítulo 20 de Segundo de Crónicas de la Biblia puede ser un modelo para la vida cristiana en tiempos de crisis. Josafat y el pueblo de Judá buscaron a Dios a través de la oración y el ayuno en medio de una crisis nacional y fueron bendecidos con la victoria a través de la fe y la adoración. El artículo también menciona cómo la palabra Beraca se utiliza para describir un negocio cristiano en México y cómo la misma trayectoria de la crisis a la bendición puede ser nuestra si confiamos en Dios.


Dr. Roberto Miranda
Nuestra fe debe afectar todos los aspectos de nuestra vida
Consejos sobre cómo la fe debe afectar todos los aspectos de nuestra vida, desde nuestras creencias hasta nuestras decisiones públicas y políticas. Al renunciar al pecado y vivir según los principios espirituales, podemos recibir la bendición de Dios.


2 Reyes 11:19 - Referencia Cruzada

Entonces Salomón se sentó en el trono del SEÑOR como rey en lugar de su padre David; prosperó y todo Israel le obedeció. (1 Crónicas 29:23)
entonces entrarán por las puertas de esta ciudad reyes y príncipes que se sienten sobre el trono de David; vendrán montados en carros y caballos, ellos y sus príncipes, los hombres de Judá y los habitantes de Jerusalén; y esta ciudad será habitada para siempre. (Jeremías 17:25)
Así dice el SEÑOR: 'Inscriban a este hombre como sin hijos, Hombre que no prosperará en sus días; Porque ninguno de sus descendientes logrará Sentarse sobre el trono de David Ni gobernar de nuevo en Judá.'" (Jeremías 22:30)
Pero en el séptimo año Joiada mandó a buscar e hizo venir a los capitanes de centenas de los Cariteos y de la guardia, y los hizo venir a él en la casa del SEÑOR. Entonces hizo un pacto con ellos en la casa del SEÑOR y los puso bajo juramento, y les mostró al hijo del rey. (2 Reyes 11:4)
Jesús les dijo: "En verdad les digo que ustedes que Me han seguido, en la regeneración, cuando el Hijo del Hombre se siente en el trono de Su gloria, ustedes se sentarán también sobre doce tronos para juzgar a las doce tribus de Israel. (Mateo 19:28)
Ve ahora mismo al rey David y dile: '¿No ha jurado usted, oh rey mi señor, a su sierva, diciendo: "Ciertamente tu hijo Salomón será rey después de mí y se sentará en mi trono?" ¿Por qué, pues, se ha hecho rey Adonías?' (1 Reyes 1:13)
Colocó porteros junto a las puertas de la casa del SEÑOR, de modo que no entrara ninguno que por alguna causa estuviera inmundo. (2 Crónicas 23:19)
Pero cuando el Hijo del Hombre venga en Su gloria, y todos los ángeles con El, entonces El se sentará en el trono de Su gloria; (Mateo 25:31)
Porque si en verdad observan este mandato, entonces entrarán reyes por las puertas de esta casa, y se sentarán en el lugar de David, en su trono. Entrarán montados en carros y caballos, el rey, sus siervos y su pueblo. (Jeremías 22:4)
otra tercera parte estará en la casa del rey, y otra tercera parte en la Puerta del Cimiento; y todo el pueblo estará en los atrios de la casa del SEÑOR. (2 Crónicas 23:5)