Nueva Biblia Latinoamericana
Entonces David dijo a toda la asamblea: "Bendigan ahora al SEÑOR su Dios." Y toda la asamblea bendijo al SEÑOR, al Dios de sus padres, y se inclinaron y se postraron ante el SEÑOR y ante el rey. (1 Crónicas 29:20)
Al día siguiente sacrificaron víctimas al SEÑOR y le ofrecieron holocaustos: 1,000 novillos, 1,000 carneros y 1,000 corderos, con sus libaciones y sacrificios en abundancia por todo Israel. (1 Crónicas 29:21)
Comieron, pues, y bebieron aquel día delante del SEÑOR con gran alegría. Y por segunda vez proclamaron rey a Salomón, hijo de David, y lo ungieron como príncipe para el SEÑOR, y a Sadoc como sacerdote. (1 Crónicas 29:22)
Entonces Salomón se sentó en el trono del SEÑOR como rey en lugar de su padre David; prosperó y todo Israel le obedeció.
Y todos los oficiales, los hombres valientes, y también todos los hijos del rey David juraron obediencia al rey Salomón. (1 Crónicas 29:24)
El SEÑOR engrandeció en gran manera a Salomón ante los ojos de todo Israel, y le dio un reinado glorioso como nunca había tenido ningún rey en Israel antes de él. (1 Crónicas 29:25)
David, hijo de Isaí, reinó sobre todo Israel; (1 Crónicas 29:26)

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1 Crónicas 29:23 - Referencia Cruzada

Y de todos mis hijos (porque el SEÑOR me ha dado muchos hijos), El ha escogido a mi hijo Salomón para que se siente en el trono del reino del SEÑOR sobre Israel. (1 Crónicas 28:5)
Salomón se sentó en el trono de David su padre y su reino se afianzó en gran manera. (1 Reyes 2:12)
Sométase toda persona a las autoridades que gobiernan. Porque no hay autoridad sino de Dios, y las que existen, por Dios son constituidas. (Romanos 13:1)
Ahora pues, hijo mío, el SEÑOR sea contigo para que prosperes y edifiques la casa del SEÑOR tu Dios tal como El ha hablado de ti. (1 Crónicas 22:11)
Yo digo: "Guarda el mandato del rey por causa del juramento de Dios. (Eclesiastés 8:2)
Porque un Niño nos ha nacido, un Hijo nos ha sido dado, Y la soberanía reposará sobre Sus hombros. Y se llamará Su nombre Admirable Consejero, Dios Poderoso, Padre Eterno, Príncipe de Paz. (Isaías 9:6)
El SEÑOR ha jurado a David Una verdad de la cual no se retractará: "De tu descendencia pondré sobre tu trono. (Salmos 132:11)
Y sucederá que cuando se cumplan tus días para que vayas a estar con tus padres, levantaré a uno de tus descendientes después de ti, que será de tus hijos; y estableceré su reino. (1 Crónicas 17:11)