Nueva Biblia Latinoamericana
Entonces el rey le dijo: "¿Cuántas veces he de tomarte juramento de que no me digas más que la verdad en el nombre del SEÑOR?" (1 Reyes 22:16)
Micaías respondió: "Vi a todo Israel Esparcido por los montes, Como ovejas sin pastor; Y el SEÑOR dijo: 'Estos no tienen señor, Que cada uno vuelva a su casa en paz.'" (1 Reyes 22:17)
Entonces el rey de Israel dijo a Josafat: "¿No te dije que no profetizaría lo bueno acerca de mí, sino lo malo?" (1 Reyes 22:18)
Respondió Micaías: "Por tanto, escuche la palabra del SEÑOR. Yo vi al SEÑOR sentado en Su trono, y todo el ejército de los cielos estaba junto a El, a Su derecha y a Su izquierda.
Y el SEÑOR dijo: '¿Quién persuadirá a Acab para que suba y caiga en Ramot de Galaad?' Y uno decía de una manera, y otro de otra. (1 Reyes 22:20)
Entonces un espíritu se adelantó, y se puso delante del SEÑOR, y dijo: 'Yo lo persuadiré.' (1 Reyes 22:21)
El SEÑOR le preguntó: '¿Cómo?' Y él respondió: 'Saldré y seré espíritu de mentira en boca de todos sus profetas.' Entonces El dijo: 'Lo persuadirás y también prevalecerás. Ve y hazlo así.' (1 Reyes 22:22)

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1 Reyes 22:19 - Referencia Cruzada

Hijo de hombre, profetiza contra los profetas de Israel que profetizan, y dile a los que profetizan por su propia inspiración: 'Escuchen la palabra del SEÑOR. (Ezequiel 13:2)
Seguí mirando Hasta que se establecieron tronos, Y el Anciano de Días se sentó. Su vestidura era blanca como la nieve, Y el cabello de Su cabeza como lana pura, Su trono, llamas de fuego, Y sus ruedas, fuego abrasador. (Daniel 7:9)
en este caso, oigan la palabra del SEÑOR, remanente de Judá. Así dice el SEÑOR de los ejércitos, el Dios de Israel: "Si se obstinan en entrar en Egipto, y entran para residir allí, (Jeremías 42:15)
Y el hombre que estaba entre los mirtos respondió: "Estos son los que el SEÑOR ha enviado a recorrer la tierra." (Zacarías 1:10)
Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, fijos los ojos en el cielo, vio la gloria de Dios y a Jesús de pie a la diestra de Dios; (Hechos 7:55)
Oigan la palabra del SEÑOR, casa de Jacob, y todas las familias de la casa de Israel. (Jeremías 2:4)
Ahora pues, escucha la palabra del SEÑOR: Tú dices: 'No profetices contra Israel ni hables contra la casa de Isaac.' (Amós 7:16)
De los ángeles dice: "EL QUE HACE A SUS ANGELES, ESPIRITUS, Y A SUS MINISTROS, LLAMA DE FUEGO." (Hebreos 1:7)
Ustedes, en cambio, se han acercado al Monte Sion y a la ciudad del Dios vivo, la Jerusalén celestial, y a miríadas de ángeles, (Hebreos 12:22)
Sobre el firmamento que estaba por encima de sus cabezas había algo semejante a un trono, de aspecto como de piedra de zafiro; y en lo que se asemejaba a un trono, sobre él, en lo más alto, había una figura con apariencia de hombre. (Ezequiel 1:26)
Al instante estaba yo en el Espíritu, y vi un trono colocado en el cielo, y a Uno sentado en el trono. (Apocalipsis 4:2)
Oigan la palabra del SEÑOR, Gobernantes de Sodoma. Escuchen la instrucción de nuestro Dios, Pueblo de Gomorra: (Isaías 1:10)
Pero cuando el Hijo del Hombre venga en Su gloria, y todos los ángeles con El, entonces El se sentará en el trono de Su gloria; (Mateo 25:31)
¿No son todos ellos espíritus ministradores, enviados para servir por causa de los que heredarán la salvación? (Hebreos 1:14)
Por tanto, oigan la palabra del SEÑOR, oh insolentes, Gobernantes de este pueblo que está en Jerusalén. (Isaías 28:14)
Miren que no desprecien a uno de estos pequeñitos, porque les digo que sus ángeles en los cielos contemplan siempre el rostro de Mi Padre que está en los cielos. (Mateo 18:10)
Micaías respondió: "Por tanto, escuchen la palabra del SEÑOR. Yo vi al SEÑOR sentado en Su trono, y todo el ejército de los cielos estaba a Su derecha y a Su izquierda. (2 Crónicas 18:18)
Y miré, y oí la voz de muchos ángeles alrededor del trono y de los seres vivientes y de los ancianos. El número de ellos era miríadas de miríadas, y millares de millares, (Apocalipsis 5:11)
Un día, cuando los hijos de Dios vinieron a presentarse delante del SEÑOR, Satanás (el adversario) vino también entre ellos. (Job 1:6)
Y sucedió que el día cuando los hijos de Dios vinieron a presentarse delante del SEÑOR, vino también Satanás (el adversario) entre ellos para presentarse delante del SEÑOR. (Job 2:1)
Bendigan al SEÑOR, ustedes Sus ángeles, Poderosos en fortaleza, que ejecutan Su mandato, Obedeciendo la voz de Su palabra. (Salmos 103:20)
Oigan, pues, la palabra del SEÑOR, todos ustedes los desterrados, a quienes he enviado de Jerusalén a Babilonia." (Jeremías 29:20)
En el año de la muerte del rey Uzías vi yo al Señor sentado sobre un trono alto y sublime, y la orla de Su manto llenaba el templo. (Isaías 6:1)