Nueva Biblia Latinoamericana
Elías se acercó a todo el pueblo y dijo: "¿Hasta cuándo vacilarán entre dos opiniones? Si el SEÑOR es Dios, síganlo; y si Baal, síganlo a él." Pero el pueblo no le respondió ni una palabra. (1 Reyes 18:21)
Entonces Elías dijo al pueblo: "Solo yo he quedado como profeta del SEÑOR, pero los profetas de Baal son 450 hombres. (1 Reyes 18:22)
Que nos den, pues, dos novillos. Que escojan un novillo para ellos y lo despedacen, y lo coloquen sobre la leña, pero que no le pongan fuego debajo; y yo prepararé el otro novillo y lo colocaré sobre la leña, y no le pondré fuego. (1 Reyes 18:23)
Entonces invoquen el nombre de su dios, y yo invocaré el nombre del SEÑOR; y el Dios que responda por fuego, ése es Dios." Y todo el pueblo respondió: "La idea es buena."
Y Elías dijo a los profetas de Baal: "Escojan un novillo para ustedes y prepárenlo primero, pues son los más, e invoquen el nombre de su dios, pero no le pongan fuego." (1 Reyes 18:25)
Entonces tomaron el novillo que les dieron y lo prepararon, e invocaron el nombre de Baal desde la mañana hasta el mediodía, diciendo: "Oh Baal, respóndenos." Pero no hubo voz ni nadie respondió. Y danzaban alrededor del altar que habían hecho. (1 Reyes 18:26)
Como al mediodía, Elías se burlaba de ellos y decía: "Clamen en voz alta, pues es un dios; tal vez estará meditando o se habrá desviado, o estará de viaje, quizá esté dormido y habrá que despertarlo." (1 Reyes 18:27)

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1 Reyes 18:24 - Referencia Cruzada

Entonces el ángel del SEÑOR extendió la punta de la vara que estaba en su mano y tocó la carne y el pan sin levadura. Y subió fuego de la roca que consumió la carne y el pan sin levadura. Y el ángel del SEÑOR desapareció de su vista. (Jueces 6:21)
Cuando Salomón terminó de orar, descendió fuego desde el cielo y consumió el holocausto y los sacrificios, y la gloria del SEÑOR llenó la casa (el templo). (2 Crónicas 7:1)
Entonces cayó el fuego del SEÑOR, y consumió el holocausto, la leña, las piedras y el polvo, y secó el agua de la zanja. (1 Reyes 18:38)
Y el rey dijo: "¿Está contigo la mano de Joab en todo esto?" Y la mujer respondió: "Vive su alma, mi señor el rey, nadie puede desviarse ni a la derecha ni a la izquierda de todo lo que mi señor el rey ha hablado. En verdad fue su siervo Joab quien me mandó, y fue él quien puso todas estas palabras en boca de su sierva; (2 Samuel 14:19)
Y salió fuego de la presencia del SEÑOR que consumió el holocausto y los pedazos de grasa sobre el altar. Al verlo, todo el pueblo aclamó y se postró rostro en tierra. (Levítico 9:24)
Entonces Ezequías dijo a Isaías: "La palabra del SEÑOR que has hablado es buena." Pues pensaba: "Habrá paz y seguridad en mis días." (Isaías 39:8)
Entonces David edificó allí un altar al SEÑOR, y ofreció holocaustos y ofrendas de paz. E invocó al SEÑOR, y El le respondió con fuego del cielo sobre el altar del holocausto. (1 Crónicas 21:26)
Y todos los Israelitas, viendo descender el fuego y la gloria del SEÑOR sobre la casa, se postraron rostro en tierra sobre el pavimento y adoraron y alabaron al SEÑOR, diciendo: "Ciertamente El es bueno; ciertamente Su misericordia es para siempre." (2 Crónicas 7:3)