Nueva Biblia Latinoamericana
Pero ahora el SEÑOR mi Dios me ha dado paz por todas partes; no hay adversario ni calamidad. (1 Reyes 5:4)
Por tanto, pienso edificar una casa al nombre del SEÑOR mi Dios, como el SEÑOR habló a mi padre David: 'Tu hijo, a quien pondré sobre el trono en tu lugar, él edificará la casa a Mi nombre.' (1 Reyes 5:5)
Ahora pues, ordena que me corten cedros del Líbano, y mis siervos estarán con tus siervos. Te daré salarios para tus siervos conforme a todo lo que tú digas, pues sabes que no hay nadie entre nosotros que sepa labrar madera como los Sidonios." (1 Reyes 5:6)
Cuando Hiram oyó las palabras de Salomón, se alegró mucho y dijo: "Bendito sea hoy el SEÑOR, que ha dado a David un hijo sabio sobre este pueblo tan numeroso."
Y envió Hiram respuesta a Salomón: "He oído el mensaje que me enviaste; haré lo que tú quieras en cuanto a las maderas de cedro y de ciprés. (1 Reyes 5:8)
Mis siervos las bajarán desde el Líbano hasta el mar; y haré de ellas balsas para ir por mar hasta el lugar adonde me indiques, y allí haré que las desaten y tú te las llevarás. Entonces cumplirás mi deseo dando alimento a mi casa." (1 Reyes 5:9)
Así Hiram dio a Salomón todo lo que deseaba de las maderas de cedro y de ciprés. (1 Reyes 5:10)

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1 Reyes 5:7 - Referencia Cruzada

El padre del justo se regocijará en gran manera, Y el que engendra un sabio se alegrará en él. (Proverbios 23:24)
Yo y los hijos que el SEÑOR me ha dado estamos por señales y prodigios en Israel, de parte del SEÑOR de los ejércitos que mora en el Monte Sion. (Isaías 8:18)
Bendito sea el SEÑOR su Dios que se agradó de usted para ponerle sobre el trono de Israel. Por el amor que el SEÑOR ha tenido siempre a Israel, le ha puesto por rey para hacer derecho y justicia." (1 Reyes 10:9)
Los proverbios de Salomón. El hijo sabio alegra al padre, Pero el hijo necio es tristeza para su madre. (Proverbios 10:1)
Péguese mi lengua al paladar Si no me acuerdo de ti, Si no enaltezco a Jerusalén Sobre mi supremo gozo. (Salmos 137:6)
Hiram, rey de Tiro, respondió en una carta que envió a Salomón: "Por cuanto el SEÑOR ama a Su pueblo, te ha hecho rey sobre ellos." (2 Crónicas 2:11)
Da, pues, a Tu siervo un corazón con entendimiento para juzgar a Tu pueblo y para discernir entre el bien y el mal. Pues ¿quién será capaz de juzgar a este pueblo Tuyo tan grande?" (1 Reyes 3:9)
Esaú alzó sus ojos y vio a las mujeres y a los niños, y dijo: "¿Quiénes son éstos que vienen contigo?" "Son los hijos que Dios en su misericordia ha concedido a tu siervo," respondió Jacob. (Génesis 33:5)
Oren ustedes por la paz de Jerusalén: "Sean prosperados los que te aman. (Salmos 122:6)
El hijo sabio alegra al padre, Pero el hombre necio desprecia a su madre. (Proverbios 15:20)
Porque un Niño nos ha nacido, un Hijo nos ha sido dado, Y la soberanía reposará sobre Sus hombros. Y se llamará Su nombre Admirable Consejero, Dios Poderoso, Padre Eterno, Príncipe de Paz. (Isaías 9:6)
El rey también ha dicho así: 'Bendito sea el SEÑOR, Dios de Israel, que ha concedido que se siente hoy en mi trono un descendiente mío mientras mis ojos lo ven.'" (1 Reyes 1:48)
El hijo sabio acepta la disciplina de su padre, Pero el insolente no escucha la reprensión. (Proverbios 13:1)
Bienaventurados sus hombres, bienaventurados estos sus siervos que están delante de usted continuamente y oyen su sabiduría. (2 Crónicas 9:7)