Nueva Biblia Latinoamericana
El que sea simple, que entre aquí." Y al falto de entendimiento, le dice: (Proverbios 9:16)
Dulces son las aguas hurtadas, Y el pan comido en secreto es sabroso." (Proverbios 9:17)
Pero él no sabe que allí están los muertos, Que sus invitados están en las profundidades del Seol. (Proverbios 9:18)
Los proverbios de Salomón. El hijo sabio alegra al padre, Pero el hijo necio es tristeza para su madre.
Tesoros mal adquiridos no aprovechan, Pero la justicia libra de la muerte. (Proverbios 10:2)
El SEÑOR no permitirá que el justo padezca hambre, Pero rechazará la avidez de los impíos. (Proverbios 10:3)
Pobre es el que trabaja con mano negligente, Pero la mano de los diligentes enriquece. (Proverbios 10:4)

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Proverbios 10:1 - Referencia Cruzada

El hijo sabio alegra al padre, Pero el hombre necio desprecia a su madre. (Proverbios 15:20)
El Predicador, además de ser sabio, enseñó también sabiduría al pueblo; y reflexionó, investigó y compuso muchos proverbios. (Eclesiastés 12:9)
El que engendra un necio, para su tristeza lo engendra, Y el padre del necio no tiene alegría. (Proverbios 17:21)
También éstos son proverbios de Salomón, que transcribieron los hombres de Ezequías, rey de Judá: (Proverbios 25:1)
¿Y quién sabe si será sabio o necio? Sin embargo, él tendrá dominio sobre todo el fruto de mi trabajo con que me afané obrando sabiamente bajo el sol. También esto es vanidad. (Eclesiastés 2:19)
La vara y la reprensión dan sabiduría, Pero el niño consentido avergüenza a su madre. (Proverbios 29:15)
También pronunció 3,000 proverbios, y sus cantares fueron 1,005. (1 Reyes 4:32)
El hijo necio es ruina de su padre, Y gotera constante las contiendas de una esposa. (Proverbios 19:13)
El que ama la sabiduría alegra a su padre, Pero el que anda con rameras malgasta su fortuna. (Proverbios 29:3)
El hijo necio es pesadumbre de su padre Y amargura para la que lo dio a luz. (Proverbios 17:25)
El padre del justo se regocijará en gran manera, Y el que engendra un sabio se alegrará en él. (Proverbios 23:24)
Hijo mío, si tu corazón es sabio, Mi corazón también se me alegrará; (Proverbios 23:15)
Los proverbios de Salomón, hijo de David, rey de Israel: (Proverbios 1:1)