Sólo que el pueblo sacrificaba en los lugares altos, porque en aquellos días aún no se había edificado casa al nombre del SEÑOR.
(1 Reyes 3:2)
Salomón amaba al SEÑOR, andando en los estatutos de su padre David, aunque sacrificaba y quemaba incienso en los lugares altos.
(1 Reyes 3:3)
El rey fue a Gabaón a sacrificar allí, porque ése era el lugar alto principal. Salomón ofreció mil holocaustos sobre ese altar.
(1 Reyes 3:4)
Y en Gabaón el SEÑOR se apareció a Salomón de noche en sueños, y Dios le dijo: "Pide lo que quieras que Yo te dé."
Entonces Salomón le respondió: "Tú has mostrado gran misericordia a Tu siervo David mi padre, según él anduvo delante de Ti con fidelidad, justicia y rectitud de corazón hacia Ti; y has guardado para él esta gran misericordia, en que le has dado un hijo que se siente en su trono, como sucede hoy.
(1 Reyes 3:6)
Ahora, SEÑOR Dios mío, has hecho a Tu siervo rey en lugar de mi padre David, aunque soy un muchacho y no sé cómo salir ni entrar (estoy sin experiencia).
(1 Reyes 3:7)
Tu siervo está en medio de Tu pueblo al cual escogiste, un pueblo inmenso que no se puede numerar ni contar por su multitud.
(1 Reyes 3:8)
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1 Reyes 3:5 - Referencia Cruzada
Tuvo un sueño, y vio que había una escalera apoyada en la tierra cuyo extremo superior alcanzaba hasta el cielo. Por ella los ángeles de Dios subían y bajaban.
(Génesis 28:12)
Y todo lo que pidan en Mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo.
(Juan 14:13)
Y si a alguno de ustedes le falta sabiduría, que se la pida a Dios, quien da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada.
(Santiago 1:5)
Pero mientras pensaba en esto, se le apareció en sueños un ángel del Señor, diciéndole: "José, hijo de David, no temas recibir a María tu mujer, porque el Niño que se ha engendrado en ella es del Espíritu Santo.
(Mateo 1:20)
Esta es la confianza que tenemos delante de El, que si pedimos cualquier cosa conforme a Su voluntad, El nos oye.
(1 Juan 5:14)
Por eso les digo que todas las cosas por las que oren y pidan, crean que ya las han recibido, y les serán concedidas .
(Marcus 11:24)
Pero cuando murió Herodes (el Grande), un ángel del Señor se apareció en sueños a José en Egipto, diciéndole:
(Mateo 2:19)
El dijo: "Oigan ahora Mis palabras: Si entre ustedes hay profeta, Yo, el SEÑOR, me manifestaré a él en visión. Hablaré con él en sueños.
(Números 12:6)
Pidan, y se les dará; busquen, y hallarán; llamen, y se les abrirá.
(Mateo 7:7)
el SEÑOR se apareció a Salomón por segunda vez, tal como se le había aparecido en Gabaón.
(1 Reyes 9:2)
Aquella noche Dios se apareció a Salomón y le dijo: "Pide lo que quieras que Yo te dé."
(2 Crónicas 1:7)
Ustedes no me escogieron a Mí, sino que Yo los escogí a ustedes, y los designé para que vayan y den fruto, y que su fruto permanezca; para que todo lo que pidan al Padre en Mi nombre se lo conceda.
(Juan 15:16)
Ciertamente Dios habla una vez, Y otra vez, pero nadie se da cuenta de ello.
(Job 33:14)
Después de haberse marchado ellos, un ángel del Señor se apareció a José en sueños, diciendo: "Levántate, toma al Niño y a Su madre y huye a Egipto, y quédate allí hasta que yo te diga; porque Herodes (el Grande) quiere buscar y matar al Niño."
(Mateo 2:13)
¿Qué quieren que haga por ustedes?" les preguntó.
(Marcus 10:36)
Entonces el SEÑOR se enojó con Salomón porque su corazón se había apartado del SEÑOR, Dios de Israel, que se le había aparecido dos veces,
(1 Reyes 11:9)
Jesús les dijo: "Ustedes no saben lo que piden. ¿Pueden beber la copa que Yo bebo, o ser bautizados con el bautismo con que soy bautizado?"
(Marcus 10:38)