Nueva Biblia Latinoamericana
Todos sus siervos pasaron junto a él, todos los Cereteos, los Peleteos y todos los Geteos, 600 hombres que habían venido con él desde Gat; todos pasaron delante del rey. (2 Samuel 15:18)
Y el rey dijo a Itai el Geteo: "¿Por qué has de venir tú también con nosotros? Regresa y quédate con el rey, porque eres un extranjero y también un desterrado; regresa a tu lugar. (2 Samuel 15:19)
Llegaste apenas ayer, ¿y he de hacer que vagues hoy con nosotros mientras yo voy por donde quiera ir? Regresa y haz volver a tus hermanos, y que sean contigo la misericordia y la verdad." (2 Samuel 15:20)
Pero Itai respondió al rey: "Vive el SEÑOR y vive mi señor el rey, ciertamente dondequiera que esté mi señor el rey, ya sea para muerte o para vida, allí también estará su siervo."
Entonces David dijo a Itai: "Ve y pasa adelante." Así Itai el Geteo pasó con todos sus hombres y con todos los pequeños que estaban con él. (2 Samuel 15:22)
Mientras todo el país lloraba en alta voz, todo el pueblo cruzó. El rey también cruzó el torrente Cedrón, y todo el pueblo pasó en dirección al desierto. (2 Samuel 15:23)
Y Sadoc pasó también, y todos los Levitas con él, llevando el arca del pacto de Dios. Y asentaron el arca de Dios, y Abiatar subió después que había terminado de pasar todo el pueblo que salía de la ciudad. (2 Samuel 15:24)

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2 Samuel 15:21 - Referencia Cruzada

Elías entonces le dijo: "Eliseo, te ruego que te quedes aquí, porque el SEÑOR me ha enviado a Jericó." Pero él dijo: "Vive el SEÑOR y vive tu alma, que no me apartaré de ti." Y fueron juntos a Jericó. (2 Reyes 2:4)
Entonces Elías le dijo: "Te ruego que te quedes aquí, porque el SEÑOR me ha enviado al Jordán." Pero Eliseo dijo: "Vive el SEÑOR y vive tu alma, que no me apartaré de ti." Y los dos siguieron caminando. (2 Reyes 2:6)
Y la madre del niño dijo: "Vive el SEÑOR y vive su alma, que no me apartaré de usted." Entonces Eliseo se levantó y la siguió. (2 Reyes 4:30)
El hombre de muchos amigos se arruina, Pero hay amigo más unido que un hermano. (Proverbios 18:24)
el cual, cuando vino y vio la gracia de Dios, se regocijó y animaba a todos para que con corazón firme permanecieran fieles al Señor; (Hechos 11:23)
Ahora pues, señor mío, vive el SEÑOR y vive su alma. Puesto que el SEÑOR le ha impedido derramar sangre y vengarse por su propia mano, sean pues como Nabal sus enemigos y los que buscan el mal contra mi señor. (1 Samuel 25:26)
No hablo para condenarlos, porque ya he dicho antes que ustedes están en nuestro corazón para morir juntos y para vivir juntos. (2 Corintios 7:3)
Pero David volvió a jurar y dijo: "Tu padre sabe bien que he hallado gracia ante tus ojos, y ha dicho: 'Que no lo sepa Jonatán para que no se entristezca.' Pero ciertamente, vive el SEÑOR y vive tu alma, que apenas hay un paso entre mí y la muerte." (1 Samuel 20:3)
Y un escriba se acercó y Le dijo: "Maestro, Te seguiré adondequiera que vayas." (Mateo 8:19)
Como resultado de esto muchos de Sus discípulos se apartaron y ya no andaban con El. (Juan 6:66)
Pero Rut le respondió: "No insistas en que te deje o que deje de seguirte; porque adonde tú vayas, yo iré, y donde tú mores, moraré. Tu pueblo será mi pueblo, y tu Dios mi Dios. (Rut 1:16)
Y Elías le dijo a Eliseo: "Te ruego que te quedes aquí, porque el SEÑOR me ha enviado hasta Betel (Casa de Dios)." Pero Eliseo le dijo: "Vive el SEÑOR y vive tu alma, que no me apartaré de ti." Así que ambos descendieron a Betel. (2 Reyes 2:2)
Entonces Pablo respondió: "¿Qué hacen, llorando y quebrantándome el corazón? Porque listo estoy no sólo a ser atado, sino también a morir en Jerusalén por el nombre del Señor Jesús." (Hechos 21:13)
En todo tiempo ama el amigo, Y el hermano nace para tiempo de angustia. (Proverbios 17:17)