Nueva Biblia Latinoamericana
Cuando Joab vino al rey y le hizo saber esto, llamó a Absalón, quien vino ante el rey y se postró sobre su rostro en tierra delante del rey. Y el rey besó a Absalón. (2 Samuel 14:33)
Aconteció después de esto que Absalón consiguió un carro y caballos, y cincuenta hombres que corrieran delante de él. (2 Samuel 15:1)
Absalón se levantaba temprano y se situaba junto al camino de la puerta; y sucedía que todo aquél que tenía un pleito y venía al rey para juicio, Absalón lo llamaba y decía: "¿De qué ciudad eres?" Y éste respondía: "Tu siervo es de una de las tribus de Israel." (2 Samuel 15:2)
Entonces Absalón le decía: "Mira, tu causa es buena y justa, pero nadie te va a escuchar de parte del rey."
Decía además Absalón: "¡Quién me nombrara juez en la tierra! Entonces todo hombre que tuviera pleito o causa alguna podría venir a mí y yo le haría justicia." (2 Samuel 15:4)
Y sucedía que cuando alguien se acercaba y se postraba ante él, él extendía su mano, lo levantaba y lo besaba. (2 Samuel 15:5)
De esta manera Absalón trataba a todo Israelita que venía al rey para juicio. Así Absalón robó el corazón de los hombres de Israel. (2 Samuel 15:6)

Otras publicaciones relacionadas con "2 Samuel 15:3":

Isaías Rivera
El Rey ha mandado Su carro para buscarte
La historia de Mefi-boset y cómo el Rey David lo acogió en su mesa a pesar de su discapacidad, enseñando la importancia de reconocer el valor humano y ofrecer protección y seguridad.


Dr. Roberto Miranda
De la crisis a la bendición
El autor, Dr. Roberto Miranda, habla sobre cómo el capítulo 20 de Segundo de Crónicas de la Biblia puede ser un modelo para la vida cristiana en tiempos de crisis. Josafat y el pueblo de Judá buscaron a Dios a través de la oración y el ayuno en medio de una crisis nacional y fueron bendecidos con la victoria a través de la fe y la adoración. El artículo también menciona cómo la palabra Beraca se utiliza para describir un negocio cristiano en México y cómo la misma trayectoria de la crisis a la bendición puede ser nuestra si confiamos en Dios.


2 Samuel 15:3 - Referencia Cruzada

Al ojo que se burla del padre Y escarnece a la madre, Lo sacarán los cuervos del valle, Y lo comerán los aguiluchos. (Proverbios 30:17)
En ti despreciaron al padre y a la madre, en medio de ti trataron con violencia al extranjero, y en ti oprimieron al huérfano y a la viuda. (Ezequiel 22:7)
Porque Dios dijo: 'HONRA A tu PADRE Y A tu MADRE,' y: 'QUIEN HABLE MAL DE su PADRE O DE su MADRE, QUE MUERA.' (Mateo 15:4)
En su lugar se levantará un hombre despreciable, a quien no se le han otorgado los honores de la realeza. Vendrá cuando haya tranquilidad y se apoderará del reino con intrigas. (Daniel 11:21)
El que maldiga a su padre o a su madre, ciertamente morirá. (Éxodo 21:17)
Honren a todos, amen a los hermanos, teman (reverencien) a Dios, honren al rey. (1 Pedro 2:17)
Y Pablo dijo: "No sabía, hermanos, que él era el sumo sacerdote; porque escrito está: 'NO HABLARAS MAL DE UNA DE LAS AUTORIDADES DE TU PUEBLO.'" (Hechos 23:5)
Falsedad habla cada uno a su prójimo; Hablan con labios lisonjeros y con doblez de corazón. (Salmos 12:2)
David reinó sobre todo Israel, y administraba justicia y derecho a todo su pueblo. (2 Samuel 8:15)
Hay gente que maldice a su padre, Y no bendice a su madre. (Proverbios 30:11)
especialmente a los que andan tras la carne en sus deseos corrompidos y desprecian la autoridad. Atrevidos y obstinados, no tiemblan cuando blasfeman de las majestades angélicas, (2 Pedro 2:10)
El bueno alcanzará el favor del SEÑOR, Pero El condenará al hombre de malos designios. (Proverbios 12:2)
Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días sean prolongados en la tierra que el SEÑOR tu Dios te da. (Éxodo 20:12)
¿No es suficiente que nos hayas sacado de una tierra que mana leche y miel para que muramos en el desierto, sino que también quieras enseñorearte sobre nosotros? (Números 16:13)
Y se juntaron contra Moisés y Aarón, y les dijeron: "¡Basta ya de ustedes! Porque toda la congregación, todos ellos son santos, y el SEÑOR está en medio de ellos. ¿Por qué, entonces, ustedes se levantan por encima de la asamblea del SEÑOR?" (Números 16:3)