Nueva Biblia Latinoamericana
Entonces Absalón mandó a buscar a Joab para enviarlo al rey, pero él no quiso venir. Y por segunda vez envió por él, pero no quiso venir. (2 Samuel 14:29)
Dijo, pues, a sus siervos: "Miren, el campo de Joab está junto al mío, y allí tiene cebada; vayan y préndanle fuego." Y los siervos de Absalón prendieron fuego al campo. (2 Samuel 14:30)
Entonces Joab se levantó, vino a la casa de Absalón y le dijo: "¿Por qué tus siervos han prendido fuego a mi campo?" (2 Samuel 14:31)
Y Absalón respondió a Joab: "Mira, mandé a decirte: 'Ven acá, para enviarte al rey a decirle: "¿Para qué vine de Gesur? Mejor me hubiera sido estar aún allá."' Ahora pues, vea yo el rostro del rey; y si hay iniquidad en mí, que me dé muerte."
Cuando Joab vino al rey y le hizo saber esto, llamó a Absalón, quien vino ante el rey y se postró sobre su rostro en tierra delante del rey. Y el rey besó a Absalón. (2 Samuel 14:33)
Aconteció después de esto que Absalón consiguió un carro y caballos, y cincuenta hombres que corrieran delante de él. (2 Samuel 15:1)
Absalón se levantaba temprano y se situaba junto al camino de la puerta; y sucedía que todo aquél que tenía un pleito y venía al rey para juicio, Absalón lo llamaba y decía: "¿De qué ciudad eres?" Y éste respondía: "Tu siervo es de una de las tribus de Israel." (2 Samuel 15:2)

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2 Samuel 14:32 - Referencia Cruzada

¿No es esto lo que te dijimos en Egipto: 'Déjanos, para que sirvamos a los Egipcios'? Porque mejor nos hubiera sido servir a los Egipcios que morir en el desierto." (Éxodo 14:12)
Trata entonces con misericordia a tu siervo, ya que has hecho entrar a tu siervo en un pacto del SEÑOR contigo. Pero si hay maldad en mí, mátame tú; pues, ¿por qué llevarme a tu padre?" (1 Samuel 20:8)
El que encubre sus pecados no prosperará, Pero el que los confiesa y los abandona hallará misericordia. (Proverbios 28:13)
Entonces Samuel vino a Saúl, y Saúl le dijo: "¡Bendito seas del SEÑOR! He cumplido el mandamiento del SEÑOR." (1 Samuel 15:13)
El hombre respondió: "La mujer que Tú me diste por compañera me dio del árbol, y yo comí." (Génesis 3:12)
Entonces ellos también responderán: 'Señor, ¿cuándo Te vimos hambriento o sediento, o como extranjero, o desnudo, o enfermo, o en la cárcel, y no Te servimos?' (Mateo 25:44)
Pero el pueblo tuvo sed allí, y murmuró el pueblo contra Moisés, y dijo: "¿Por qué nos has hecho subir de Egipto para matarnos de sed a nosotros, a nuestros hijos y a nuestros ganados?" (Éxodo 17:3)
Porque en sus propios ojos la transgresión le engaña En cuanto a descubrir su iniquidad y aborrecerla. (Salmos 36:2)
Los Israelitas les decían: "Ojalá hubiéramos muerto a manos del SEÑOR en la tierra de Egipto cuando nos sentábamos junto a las ollas de carne, cuando comíamos pan hasta saciarnos. Pues nos han traído a este desierto para matar de hambre a toda esta multitud." (Éxodo 16:3)
Ahora bien, sabemos que cuanto dice la Ley, lo dice a los que están bajo la Ley, para que toda boca se calle y todo el mundo sea hecho responsable ante Dios. (Romanos 3:19)
¿Se han avergonzado de la abominación que han cometido? Ciertamente no se han avergonzado, Tampoco han sabido ruborizarse. Por tanto caerán entre los que caigan, En la hora de su castigo serán derribados," dice el SEÑOR. (Jeremías 8:12)
Aunque te laves con lejía Y uses mucho jabón, La mancha de tu iniquidad está aún delante de Mí," declara el Señor DIOS. (Jeremías 2:22)