Nueva Biblia Latinoamericana
Sepultaron, pues, a Abner en Hebrón. El rey alzó su voz y lloró junto al sepulcro de Abner, y lloró también todo el pueblo. (2 Samuel 3:32)
Y el rey entonó una elegía por Abner, y dijo: "¿Había de morir Abner como muere un insensato? (2 Samuel 3:33)
Tus manos no estaban atadas, ni tus pies puestos en grillos; Como el que cae delante de los malvados, has caído." Y todo el pueblo volvió a llorar por él. (2 Samuel 3:34)
Entonces todo el pueblo se llegó a David para persuadirlo a que comiera pan mientras aún era de día. Pero David juró: "Así me haga Dios y aun más, si pruebo pan o cosa alguna antes de ponerse el sol."
Todo el pueblo reparó en ello, y les agradó, pues todo lo que el rey hacía agradaba a todo el pueblo. (2 Samuel 3:36)
Así todo el pueblo y todo Israel comprendió aquel día que no había sido el deseo del rey que se diera muerte a Abner, hijo de Ner. (2 Samuel 3:37)
Entonces el rey dijo a sus siervos: "¿No saben que un príncipe y un gran hombre ha caído hoy en Israel? (2 Samuel 3:38)

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2 Samuel 3:35 - Referencia Cruzada

Y Elí dijo: "¿Cuál es la palabra que el SEÑOR te habló? Te ruego que no me la ocultes. Así te haga Dios, y aún más, si me ocultas algo de todas las palabras que El te habló." (1 Samuel 3:17)
Así haga Dios a Abner, y aún más, si lo que el SEÑOR ha jurado a David no lo obtengo para él: (2 Samuel 3:9)
Donde tú mueras, allí moriré, y allí seré sepultada. Así haga el SEÑOR conmigo, y aún peor, si algo, excepto la muerte, nos separa." (Rut 1:17)
Se lamentaron y lloraron y ayunaron hasta el atardecer por Saúl y por su hijo Jonatán, por el pueblo del SEÑOR y por la casa de Israel, porque habían caído a espada. (2 Samuel 1:12)
Harán como Yo he hecho; no cubrirán sus bigotes ni comerán pan de duelo. (Ezequiel 24:22)
Todos los Israelitas y todo el pueblo subieron y vinieron a Betel y lloraron; y permanecieron allí delante del SEÑOR y ayunaron ese día hasta la noche. Y ofrecieron holocaustos y ofrendas de paz delante del SEÑOR. (Jueces 20:26)
Los ancianos de su casa se pusieron a su lado para levantarlo del suelo, pero él no quiso, y no comió con ellos. (2 Samuel 12:17)
Gime en silencio, no hagas duelo por los muertos; átate el turbante, ponte el calzado en los pies y no te cubras los bigotes ni comas pan de duelo." (Ezequiel 24:17)
No partirán el pan en el duelo para ellos, a fin de consolarlos por el muerto, ni les darán a beber la copa de consolación por su padre o por su madre. (Jeremías 16:7)