Nueva Biblia Latinoamericana
Rebeca tenía un hermano que se llamaba Labán, y Labán salió corriendo hacia el hombre a la fuente. (Génesis 24:29)
Cuando Labán vio el anillo y los brazaletes en las manos de su hermana, y oyó las palabras de su hermana Rebeca, que le contó: "Esto es lo que el hombre me dijo," Labán fue al hombre, que estaba con los camellos junto a la fuente, (Génesis 24:30)
y le dijo: "Entra, bendito del SEÑOR, ¿Por qué estás afuera? Yo he preparado la casa y un lugar para los camellos." (Génesis 24:31)
Entonces el hombre entró en la casa, y Labán descargó los camellos y les dio paja y forraje, y trajo agua para que se lavaran los pies, él y los hombres que estaban con él.
Pero cuando la comida fue puesta delante de él para que comiera, dijo: "No comeré hasta que haya dicho el propósito de mi viaje." "Habla," le dijo Labán. (Génesis 24:33)
Soy siervo de Abraham," comenzó a decir. (Génesis 24:34)
Y el SEÑOR ha bendecido en gran manera a mi señor, que se ha enriquecido. Le ha dado ovejas y vacas, plata y oro, siervos y siervas, camellos y asnos. (Génesis 24:35)

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Génesis 24:32 - Referencia Cruzada

Después el hombre llevó a los hombres a casa de José, y les dio agua y se lavaron los pies. También dio forraje a sus asnos. (Génesis 43:24)
y les dijo: "Señores míos, les ruego que entren en la casa de su siervo y pasen en ella la noche y laven sus pies. Entonces se levantarán temprano y continuarán su camino." "No," dijeron ellos, "sino que pasaremos la noche en la plaza." (Génesis 19:2)
Y volviéndose hacia la mujer, le dijo a Simón: "¿Ves esta mujer? Yo entré a tu casa y no Me diste agua para Mis pies, pero ella ha regado Mis pies con sus lágrimas y los ha secado con sus cabellos. (Lucas 7:44)
Ella se levantó y postrándose rostro en tierra, dijo: "Miren, su sierva es una criada para lavar los pies de los siervos de mi señor." (1 Samuel 25:41)
Que se traiga ahora un poco de agua y lávense ustedes los pies, y reposen bajo el árbol. (Génesis 18:4)
Y lo llevó a su casa y dio forraje a los asnos. Ellos se lavaron los pies, comieron y bebieron. (Jueces 19:21)
que tenga testimonio de buenas obras; si ha criado hijos, si ha mostrado hospitalidad a extraños, si ha lavado los pies de los santos, si ha ayudado a los afligidos y si se ha consagrado (dedicado) a toda buena obra. (1 Timoteo 5:10)
se levantó de la cena y se quitó el manto, y tomando una toalla, se la ciñó. (Juan 13:4)