sino que irás a mi tierra y a mis parientes, y tomarás mujer para mi hijo Isaac."
(Génesis 24:4)
Y el siervo le dijo: "Tal vez la mujer no quiera seguirme a esta tierra. ¿Debo volver y llevar a su hijo a la tierra de donde usted vino?"
(Génesis 24:5)
De ningún modo debes llevar allá a mi hijo," le respondió Abraham.
(Génesis 24:6)
El SEÑOR, Dios de los cielos, que me tomó de la casa de mi padre y de la tierra donde nací, y que me habló y me juró, diciendo: 'A tu descendencia daré esta tierra,' El mandará Su ángel delante de ti, y tomarás de allí mujer para mi hijo.
Si la mujer no quiere seguirte, quedarás libre de éste mi juramento. Sólo que no lleves allá a mi hijo."
(Génesis 24:8)
El siervo puso la mano debajo del muslo de Abraham su señor, y le juró sobre este asunto.
(Génesis 24:9)
Entonces el siervo tomó diez camellos de entre los camellos de su señor, y partió con toda clase de bienes de su señor en su mano; se levantó y fue a Mesopotamia, a la ciudad de Nacor.
(Génesis 24:10)
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Génesis 24:7 - Referencia Cruzada
Y te daré a ti, y a tu descendencia después de ti, la tierra de tus peregrinaciones, toda la tierra de Canaán como posesión perpetua. Y Yo seré su Dios."
(Génesis 17:8)
Yo enviaré un ángel delante de ti, para que te guarde en el camino y te traiga al lugar que Yo he preparado.
(Éxodo 23:20)
Sé fuerte y valiente, porque tú darás a este pueblo posesión de la tierra que juré a sus padres que les daría.
(Josué 1:6)
Por la fe habitó como extranjero en la tierra de la promesa como en tierra extraña, viviendo en tiendas como Isaac y Jacob, coherederos de la misma promesa,
(Hebreos 11:9)
Con Tu consejo me guiarás, Y después me recibirás en gloria.
(Salmos 73:24)
Enviaré un ángel delante de ti, y echaré fuera a los Cananeos, a los Amorreos, a los Hititas, a los Ferezeos, a los Heveos y a los Jebuseos.
(Éxodo 33:2)
En los días de estos reyes, el Dios del cielo levantará un reino que jamás será destruido, y este reino no será entregado a otro pueblo. Desmenuzará y pondrá fin a todos aquellos reinos, y él permanecerá para siempre,
(Daniel 2:44)
Acuérdate de Abraham, de Isaac y de Israel, Tus siervos, a quienes juraste por Ti mismo, y les dijiste: 'Yo multiplicaré la descendencia de ustedes como las estrellas del cielo, y toda esta tierra de la cual he hablado, daré a sus descendientes, y ellos la heredarán para siempre.'"
(Éxodo 32:13)
Reside en esta tierra y Yo estaré contigo y te bendeciré, porque a ti y a tu descendencia daré todas estas tierras, y confirmaré contigo el juramento que juré a tu padre Abraham.
(Génesis 26:3)
Entonces le dijo el SEÑOR: "Esta es la tierra que juré dar a Abraham, a Isaac y a Jacob: 'Yo la daré a tu descendencia.' Te he permitido verla con tus ojos, pero no pasarás a ella."
(Deuteronomio 34:4)
En aquella misma hora hubo un gran terremoto y la décima parte de la ciudad se derrumbó, y siete mil personas murieron en el terremoto, y los demás, aterrorizados, dieron gloria al Dios del cielo.
(Apocalipsis 11:13)
El SEÑOR se le apareció aquella misma noche y le dijo: "Yo soy el Dios de tu padre Abraham; No temas, porque Yo estoy contigo. Y te bendeciré y multiplicaré tu descendencia, Por amor de Mi siervo Abraham."
(Génesis 26:24)
En aquel día el SEÑOR hizo un pacto con Abram, diciendo: "A tu descendencia he dado esta tierra, Desde el río de Egipto hasta el río grande, el Río Eufrates:
(Génesis 15:18)
¿No son todos ellos espíritus ministradores, enviados para servir por causa de los que heredarán la salvación?
(Hebreos 1:14)
El les respondió: "Soy Hebreo, y temo al SEÑOR Dios del cielo, que hizo el mar y la tierra."
(Jonás 1:9)
Porque el SEÑOR no pudo introducir a este pueblo a la tierra que les había prometido con juramento, por eso los mató en el desierto.'
(Números 14:16)
Ninguno de estos hombres que salieron de Egipto, de veinte años arriba, verá la tierra que juré a Abraham, a Isaac y a Jacob, porque no Me siguieron fielmente,
(Números 32:11)
No le dio en ella heredad, ni siquiera la medida de la planta del pie, y sin embargo, aunque no tenía hijo, prometió que SE LA DARIA EN POSESION A EL Y A SU DESCENDENCIA DESPUES DE EL.
(Hechos 7:5)
Y será que cuando el SEÑOR te lleve a la tierra del Cananeo, del Hitita, del Amorreo, del Heveo y del Jebuseo, la cual juró a tus padres que te daría, tierra que mana leche y miel, celebrarás esta ceremonia en este mes.
(Éxodo 13:5)
Bendigan al SEÑOR, ustedes Sus ángeles, Poderosos en fortaleza, que ejecutan Su mandato, Obedeciendo la voz de Su palabra.
(Salmos 103:20)
Confía en el SEÑOR con todo tu corazón, Y no te apoyes en tu propio entendimiento.
(Proverbios 3:5)
y le dijo: "Por Mí mismo he jurado," declara el SEÑOR, "que por cuanto has hecho esto y no me has rehusado tu hijo, tu único,
(Génesis 22:16)
Así dice Ciro, rey de Persia: 'El SEÑOR, el Dios de los cielos, me ha dado todos los reinos de la tierra, y El me ha designado para que Le edifique una casa en Jerusalén, que está en Judá.
(Esdras 1:2)
pues toda la tierra que ves te la daré a ti y a tu descendencia para siempre.
(Génesis 13:15)
En todas sus angustias El estuvo afligido, Y el ángel de Su presencia los salvó. En Su amor y en Su compasión los redimió, Los levantó y los sostuvo todos los días de antaño.
(Isaías 63:9)
De cierto que ustedes no entrarán en la tierra en la cual juré establecerlos, excepto Caleb, hijo de Jefone, y Josué, hijo de Nun.
(Números 14:30)
El ángel del SEÑOR subió de Gilgal a Boquim y dijo a los Israelitas: "Yo los saqué a ustedes de Egipto y los conduje a la tierra que había prometido a sus padres y les dije: 'Jamás quebrantaré Mi pacto con ustedes,
(Jueces 2:1)
Y el SEÑOR dijo a Abram: "Vete de tu tierra, De entre tus parientes Y de la casa de tu padre, A la tierra que Yo te mostraré.
(Génesis 12:1)
Miren, he puesto la tierra delante de ustedes. Entren y tomen posesión de la tierra que el SEÑOR juró dar a sus padres Abraham, Isaac y Jacob, a ellos y a su descendencia después de ellos.'
(Deuteronomio 1:8)
Yo te haré saber y te enseñaré el camino en que debes andar; Te aconsejaré con Mis ojos puestos en ti.
(Salmos 32:8)
El ángel del SEÑOR acampa alrededor de los que Le temen, Y los rescata.
(Salmos 34:7)