El SEÑOR Dios hizo brotar de la tierra todo árbol agradable a la vista y bueno para comer. Asimismo, en medio del huerto, hizo brotar el árbol de la vida y el árbol del conocimiento (de la ciencia) del bien y del mal.
(Génesis 2:9)
Del Edén salía un río para regar el huerto, y de allí se dividía y se convertía en otros cuatro ríos.
(Génesis 2:10)
El nombre del primero es Pisón. Este es el que rodea toda la tierra de Havila, donde hay oro.
(Génesis 2:11)
El oro de aquella tierra es bueno; allí hay bedelio y ónice.
El nombre del segundo río es Gihón. Este es el que rodea la tierra de Cus.
(Génesis 2:13)
El nombre del tercer río es Tigris. Este es el que corre al oriente de Asiria. Y el cuarto río es el Eufrates.
(Génesis 2:14)
El SEÑOR Dios tomó al hombre y lo puso en el huerto del Edén para que lo cultivara y lo cuidara.
(Génesis 2:15)
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Génesis 2:12 - Referencia Cruzada
En el Edén estabas, en el huerto de Dios; Toda piedra preciosa era tu vestidura: El rubí, el topacio y el diamante, El berilo, el ónice y el jaspe, El zafiro, la turquesa y la esmeralda; Y el oro, la hechura de tus engastes y de tus encajes, Estaba en ti. El día que fuiste creado Fueron preparados.
(Ezequiel 28:13)
y la cuarta hilera, un berilo, un ónice y un jaspe. Todas estarán engastadas en filigrana de oro.
(Éxodo 28:20)
y la cuarta hilera, un berilo, un ónice y un jaspe. Estaban montadas en engaste de filigrana de oro.
(Éxodo 39:13)
No puede evaluarse con oro de Ofir, Ni con ónice precioso, ni con zafiro.
(Job 28:16)
Y el maná era como una semilla de cilantro, y su aspecto como el del bedelio.
(Números 11:7)