Nueva Biblia Latinoamericana
El día quince del mes séptimo, cuando hayan recogido el fruto de la tierra, celebrarán la fiesta del SEÑOR por siete días, con reposo en el primer día y reposo en el octavo día. (Levítico 23:39)
Y el primer día tomarán para ustedes frutos de árboles hermosos, hojas de palmera y ramas de árboles frondosos, y sauces de río; y se alegrarán delante del SEÑOR su Dios por siete días. (Levítico 23:40)
Así la celebrarán como fiesta al SEÑOR por siete días en el año. Será estatuto perpetuo para todas sus generaciones; la celebrarán en el mes séptimo. (Levítico 23:41)
Habitarán en tabernáculos por siete días; todo nativo de Israel vivirá en tabernáculos,
para que sus generaciones sepan que Yo hice habitar en tabernáculos a los Israelitas cuando los saqué de la tierra de Egipto. Yo soy el SEÑOR su Dios.'" (Levítico 23:43)
Así declaró Moisés a los Israelitas las fiestas señaladas del SEÑOR. (Levítico 23:44)
Entonces el SEÑOR le dijo a Moisés: (Levítico 24:1)

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Levítico 23:42 - Referencia Cruzada

Y encontraron escrito en la ley que el SEÑOR había mandado por medio de Moisés que los Israelitas habitaran en tabernáculos (tiendas) durante la fiesta del mes séptimo. (Nehemías 8:14)
¡Cuán hermosas son tus tiendas, oh Jacob; Tus moradas, oh Israel! (Números 24:5)
Y levantó Balaam sus ojos y vio a Israel acampado por tribus; y vino sobre él el Espíritu de Dios. (Números 24:2)
Porque sabemos que si la tienda terrenal que es nuestra morada, es destruida, tenemos de Dios un edificio, una casa no hecha por manos, eterna en los cielos. (2 Corintios 5:1)
Jacob siguió hasta Sucot. Allí se edificó una casa e hizo cobertizos para su ganado. Por eso al lugar se le puso el nombre de Sucot. (Génesis 33:17)
Hemos habitado solamente en tiendas, y hemos obedecido y hecho conforme a todo lo que nos mandó nuestro padre Jonadab. (Jeremías 35:10)
Todos éstos murieron en fe, sin haber recibido las promesas, pero habiéndolas visto desde lejos y aceptado con gusto, confesando que eran extranjeros y peregrinos (expatriados) sobre la tierra. (Hebreos 11:13)