Nueva Biblia Latinoamericana
Y me dijo: "Estas palabras son fieles y verdaderas." El Señor, el Dios de los espíritus de los profetas, envió a Su ángel para mostrar a Sus siervos las cosas que han de suceder enseguida. (Apocalipsis 22:6)
Por tanto, Yo vengo pronto. Bienaventurado el que guarda las palabras de la profecía de este libro." (Apocalipsis 22:7)
Yo, Juan, soy el que oyó y vio estas cosas. Y cuando oí y vi, me postré para adorar a los pies del ángel que me mostró estas cosas. (Apocalipsis 22:8)
Y me dijo: "No hagas eso. Yo soy consiervo tuyo y de tus hermanos los profetas y de los que guardan las palabras de este libro. Adora a Dios."
También me dijo: "No selles las palabras de la profecía de este libro, porque el tiempo está cerca. (Apocalipsis 22:10)
Que el injusto siga haciendo injusticias, que el impuro siga siendo impuro, que el justo siga practicando la justicia, y que el que es santo siga guardándose santo." (Apocalipsis 22:11)
Por tanto, Yo vengo pronto, y Mi recompensa está conmigo para recompensar a cada uno según sea su obra. (Apocalipsis 22:12)

Otras publicaciones relacionadas con "Apocalipsis 22:9":

Richard Booker
El final de todas las cosas está cerca. Estás listo?
El doctor Richard Booker habla sobre cómo servir a Dios en los últimos tiempos y profetiza cambios dramáticos en el mundo en los próximos años.


Richard Booker
El fin de todas las cosas está cerca. ¿Estás listo?
El Dr. Richard Booker nos enseña a través de la primera de Pedro sobre la vigilancia, el amor, la hospitalidad y la fidelidad de Dios.


Apocalipsis 22:9 - Referencia Cruzada

Entonces el Rey deseará tu hermosura; Inclínate ante El, porque El es tu señor. (Salmos 45:11)
Ustedes adoran lo que no conocen; nosotros adoramos lo que conocemos, porque la salvación viene de los Judíos. (Juan 4:22)
¡Oh Señor! ¿Quién no temerá y glorificará Tu nombre? Pues sólo Tú eres santo; Porque TODAS LAS NACIONES VENDRAN Y ADORARAN EN TU PRESENCIA, Pues Tus justos juicios han sido revelados." (Apocalipsis 15:4)
Yo testifico a todos los que oyen las palabras de la profecía de este libro: si alguien añade a ellas, Dios traerá sobre él las plagas que están escritas en este libro. (Apocalipsis 22:18)
Y ten cuidado, no sea que levantes los ojos al cielo y veas el sol, la luna, las estrellas y todo el ejército del cielo, y seas impulsado a adorarlos y servirlos, cosas que el SEÑOR tu Dios ha concedido a todos los pueblos debajo de todos los cielos. (Deuteronomio 4:19)
Sino que al SEÑOR, que los hizo subir de la tierra de Egipto con gran poder y con brazo extendido, a El temerán (reverenciarán) y ante El se inclinarán y a El ofrecerán sacrificios. (2 Reyes 17:36)
que decía a gran voz: "Teman (Reverencien) a Dios y den a El gloria, porque la hora de Su juicio ha llegado. Adoren al que hizo el cielo y la tierra, el mar y las fuentes de las aguas." (Apocalipsis 14:7)
Nadie los defraude de su premio deleitándose en la humillación de sí mismo y en la adoración de los ángeles, basándose en las visiones que ha visto, envanecido sin causa por su mente carnal, (Colosenses 2:18)
El resto de la humanidad, los que no fueron muertos por estas plagas, no se arrepintieron de las obras de sus manos ni dejaron de adorar a los demonios y a los ídolos de oro, de plata, de bronce, de piedra, y de madera, que no pueden ver ni oír ni andar. (Apocalipsis 9:20)
No adorarás a ningún otro dios, ya que el SEÑOR, cuyo nombre es Celoso, es Dios celoso. (Éxodo 34:14)
Entonces caí a sus pies para adorarlo. Y me dijo: "No hagas eso. Yo soy consiervo tuyo y de tus hermanos que poseen el testimonio de Jesús; adora a Dios. El testimonio de Jesús es el espíritu de la profecía." (Apocalipsis 19:10)
los veinticuatro ancianos se postran delante de Aquél que está sentado en el trono, y adoran a Aquél que vive por los siglos de los siglos, y echan sus coronas delante del trono, diciendo: (Apocalipsis 4:10)
También me dijo: "No selles las palabras de la profecía de este libro, porque el tiempo está cerca. (Apocalipsis 22:10)
Y sabemos que el Hijo de Dios ha venido y nos ha dado entendimiento a fin de que conozcamos a Aquél que es verdadero; y nosotros estamos en Aquél que es verdadero, en Su Hijo Jesucristo. Este es el verdadero Dios y la vida eterna. (1 Juan 5:20)
Por tanto, si Te postras delante de mí (me adoras), todo será Tuyo." (Lucas 4:7)
y Le dijo: "Todo esto Te daré, si Te postras y me adoras." (Mateo 4:9)