Nueva Biblia Latinoamericana
pues el Cordero que está en medio del trono los pastoreará y los guiará a manantiales de aguas de vida, y Dios enjugará toda lágrima de sus ojos." (Apocalipsis 7:17)
Cuando el Cordero abrió el séptimo sello, hubo silencio en el cielo como por media hora. (Apocalipsis 8:1)
Vi a los siete ángeles que están de pie delante de Dios, y se les dieron siete trompetas. (Apocalipsis 8:2)
Otro ángel vino y se paró ante el altar con un incensario de oro, y se le dio mucho incienso para que lo añadiera a las oraciones de todos los santos sobre el altar de oro que estaba delante del trono.
De la mano del ángel subió ante Dios el humo del incienso con las oraciones de los santos. (Apocalipsis 8:4)
Después el ángel tomó el incensario, lo llenó con el fuego del altar y lo arrojó a la tierra, y hubo truenos, ruidos, relámpagos, y un terremoto. (Apocalipsis 8:5)
Entonces los siete ángeles que tenían las siete trompetas se prepararon para tocarlas. (Apocalipsis 8:6)

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Apocalipsis 8:3 - Referencia Cruzada

Pasados cuarenta años, SE LE APARECIO UN ANGEL EN EL DESIERTO DEL MONTE Sinaí, EN LA LLAMA DE UNA ZARZA QUE ARDIA. (Hechos 7:30)
Y el ángel del SEÑOR se le apareció en una llama de fuego, en medio de una zarza. Al fijarse Moisés, vio que la zarza ardía en fuego, pero la zarza no se consumía. (Éxodo 3:2)
Porque no tenemos un Sumo Sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras flaquezas, sino Uno que ha sido tentado en todo como nosotros , pero sin pecado. (Hebreos 4:15)
También vi a otro ángel que subía de donde sale el sol y que tenía el sello del Dios vivo. Y gritó a gran voz a los cuatro ángeles a quienes se les había concedido hacer daño a la tierra y al mar: (Apocalipsis 7:2)
El sexto ángel tocó la trompeta, y oí una voz que salía de los cuatro cuernos del altar de oro que está delante de Dios, (Apocalipsis 9:13)
Por lo cual El también es poderoso para salvar para siempre a los que por medio de El se acercan a Dios, puesto que vive perpetuamente para interceder por ellos. (Hebreos 7:25)
Y Moisés le dijo a Aarón: "Toma tu incensario y pon en él fuego del altar, y echa incienso en él; tráelo entonces pronto a la congregación y haz expiación por ellos, porque la ira ha salido de parte del SEÑOR. ¡La plaga ha comenzado!" (Números 16:46)
Entonces, hermanos, puesto que tenemos confianza para entrar al Lugar Santísimo por la sangre de Jesús, (Hebreos 10:19)
Harás además un altar para quemar incienso en él. De madera de acacia lo harás. (Éxodo 30:1)
el cual tenía el altar de oro del incienso y el arca del pacto cubierta toda de oro, en la cual había una urna de oro que contenía el maná y la vara de Aarón que retoñó y las tablas del pacto. (Hebreos 9:4)
¿Quién es el que condena? Cristo Jesús es el que murió, sí, más aún, el que resucitó, el que además está a la diestra de Dios, el que también intercede por nosotros. (Romanos 8:34)
Pero cuando llegó a ser fuerte, su corazón se hizo tan orgulloso que obró corruptamente, y fue infiel al SEÑOR su Dios, pues entró al templo del SEÑOR para quemar incienso sobre el altar del incienso. (2 Crónicas 26:16)
Cuando tomó el libro, los cuatro seres vivientes y los veinticuatro ancianos se postraron delante del Cordero. Cada uno tenía un arpa y copas de oro llenas de incienso, que son las oraciones de los santos. (Apocalipsis 5:8)
Entonces hizo el altar del incienso de madera de acacia. Era cuadrado, de un codo (45 cm) su longitud, de 45 centímetros su anchura y de 90 centímetros su altura. Sus cuernos eran de una sola pieza con él. (Éxodo 37:25)
Vi a otro ángel poderoso que descendía del cielo, envuelto en una nube. El arco iris estaba sobre su cabeza, su rostro era como el sol y sus pies como columnas de fuego. (Apocalipsis 10:1)
Luego colocó el altar de oro en la tienda de reunión, delante del velo; (Éxodo 40:26)
Hijitos míos, les escribo estas cosas para que no pequen. Y si alguien peca, tenemos Abogado (Intercesor) para con el Padre, a Jesucristo el Justo. (1 Juan 2:1)
las copas, las despabiladeras, los tazones, las cucharas y los incensarios de oro puro; y los goznes para las puertas de la casa interior, el Lugar Santísimo, y para las puertas de la casa, es decir, de la nave, también de oro. (1 Reyes 7:50)
Toda la multitud del pueblo estaba afuera orando a la hora de la ofrenda de incienso. (Lucas 1:10)
Vi al Señor de pie junto al altar, y me dijo: "Golpea los capiteles para que se estremezcan los umbrales, Y rómpelos sobre la cabeza de todos. Entonces mataré a espada al resto de ellos; No habrá entre ellos fugitivo que huya, Ni refugiado de ellos que escape. (Amós 9:1)
De la mano del ángel subió ante Dios el humo del incienso con las oraciones de los santos. (Apocalipsis 8:4)
Israel bendijo a José, y dijo: "El Dios delante de quien anduvieron mis padres Abraham e Isaac, El Dios que ha sido mi pastor toda mi vida hasta este día, (Génesis 48:15)
Y tomará un incensario lleno de brasas de fuego de sobre el altar que está delante del SEÑOR, y dos puñados de incienso aromático molido, y lo llevará detrás del velo. (Levítico 16:12)
Sea puesta mi oración delante de Ti como incienso, El alzar de mis manos como la ofrenda de la tarde. (Salmos 141:2)
Porque desde la salida del sol hasta su puesta, Mi nombre será grande entre las naciones, y en todo lugar se ofrecerá incienso a Mi nombre, y ofrenda pura de cereal; porque grande será Mi nombre entre las naciones," dice el SEÑOR de los ejércitos. (Malaquías 1:11)
Cuando el Cordero abrió el quinto sello, vi debajo del altar las almas de los que habían sido muertos a causa de la palabra de Dios y del testimonio que habían mantenido. (Apocalipsis 6:9)