Nueva Biblia Latinoamericana
Ante todo, sepan esto: que en los últimos días vendrán burladores con su sarcasmo, siguiendo sus propias pasiones, (2 Pedro 3:3)
y diciendo: "¿Dónde está la promesa de Su venida? Porque desde que los padres durmieron (murieron), todo continúa tal como estaba desde el principio de la creación." (2 Pedro 3:4)
Pues cuando dicen esto, no se dan cuenta de que los cielos existían desde hace mucho tiempo, y también la tierra, surgida del agua y establecida entre las aguas por la palabra de Dios, (2 Pedro 3:5)
por lo cual el mundo de entonces fue destruido, siendo inundado por el agua.
Pero los cielos y la tierra actuales están reservados por Su palabra para el fuego, guardados para el día del juicio y de la destrucción de los impíos. (2 Pedro 3:7)
Pero, amados, no ignoren esto: que para el Señor un día es como mil años, y mil años como un día. (2 Pedro 3:8)
El Señor no se tarda en cumplir Su promesa, según algunos entienden la tardanza, sino que es paciente para con ustedes, no queriendo que nadie perezca, sino que todos vengan al arrepentimiento. (2 Pedro 3:9)

Otras publicaciones relacionadas con "2 Pedro 3:6":

Dr. Roberto Miranda
La segunda venida de Cristo - el Señor no se tarda
En esta enseñanza, el pastor habla acerca de la importancia de entender la Segunda Venida de Jesucristo y cómo esto nos ayuda a no aferrarnos demasiado a las cosas de este mundo. Pedro habla acerca de la tardanza del Señor y de los burladores que ignoran la creación y la destrucción de la tierra por agua y fuego. Se invita a cualquier persona que desee arreglar cuentas con Jesús a hacerlo ahora mismo.


Dr. Roberto Miranda
Sobrios y vigilantes
En este pasaje de Primera de Tesalonicenses, el apóstol Pablo llama a ser sobrios y velar, y no ser como los borrachos del mundo que no ven la realidad. Él nos recuerda que no somos hijos de ira, sino que Dios nos ha puesto para alcanzar la salvación a través de Jesucristo. Por lo tanto, debemos vivir nuestras vidas a la luz de los valores y enseñanzas de la Palabra de Dios.


Omar Soto
Jesús - El dador y cumplidor de promesas
Reflexión sobre Jesús como cumplidor de promesas y la importancia de mantener la esperanza y confianza en Dios en tiempos difíciles.


2 Pedro 3:6 - Referencia Cruzada

Comían, bebían, se casaban y se daban en casamiento, hasta el día en que Noé entró en el arca, y vino el diluvio y los destruyó a todos. (Lucas 17:27)
El retiene las aguas, y todo se seca, Y las envía, e inundan la tierra. (Job 12:15)
Tampoco perdonó al mundo antiguo, sino que guardó a Noé, un predicador (heraldo) de justicia, con otros siete, cuando trajo el diluvio sobre el mundo de los impíos. (2 Pedro 2:5)
y me acordaré de Mi pacto, con ustedes y con todo ser viviente de toda carne. Nunca más se convertirán las aguas en diluvio para destruir toda carne. (Génesis 9:15)
Pues así como en aquellos días antes del diluvio estaban comiendo y bebiendo, casándose y dándose en matrimonio, hasta el día en que Noé entró en el arca, (Mateo 24:38)
Aconteció que a los siete días las aguas del diluvio vinieron sobre la tierra. (Génesis 7:10)