Nueva Biblia Latinoamericana
Así hablen ustedes y así procedan, como los que han de ser juzgados por la ley de la libertad. (Santiago 2:12)
Porque el juicio será sin misericordia para el que no ha mostrado misericordia. La misericordia triunfa sobre el juicio. (Santiago 2:13)
¿De qué sirve, hermanos míos, si alguien dice que tiene fe, pero no tiene obras? ¿Acaso puede esa fe salvarlo? (Santiago 2:14)
Si un hermano o una hermana no tienen ropa y carecen del sustento diario,
y uno de ustedes les dice: "Vayan en paz, caliéntense y sáciense," pero no les dan lo necesario para su cuerpo, ¿de qué sirve? (Santiago 2:16)
Así también la fe por sí misma, si no tiene obras, está muerta. (Santiago 2:17)
Pero alguien dirá: "Tú tienes fe y yo tengo obras. Muéstrame tu fe sin las obras, y yo te mostraré mi fe por mis obras." (Santiago 2:18)

Otras publicaciones relacionadas con "Santiago 2:15":

Dr. Roberto Miranda
Justificado por fe sin las obras de la ley
El pasaje de Romanos 3 habla sobre la incapacidad del hombre para salvarse a sí mismo y la necesidad de la gracia y la fe en Cristo Jesús para ser salvado. El pastor enfatiza la importancia de la gratitud hacia Dios y la misericordia hacia los demás, y se ofrece a orar por aquellos que aún no han aceptado a Jesús como su salvador.


Dr. Roberto Miranda
Debemos juzgar a los demás - o no?
En este sermón, el pastor enseña acerca del Capítulo 2 de Romanos y cómo es importante entender el contexto histórico y cultural en el cual Pablo escribió esta epístola, así como la importancia de juzgar con temor y humildad y vivir vidas santas.


Santiago 2:15 - Referencia Cruzada

¿No es para que compartas tu pan con el hambriento, Y recibas en casa a los pobres sin hogar; Para que cuando veas al desnudo lo cubras, Y no te escondas de tu semejante? (Isaías 58:7)
Ese hombre no oprime a nadie, sino que devuelve al deudor su prenda; no comete robo, sino que da su pan al hambriento y cubre con ropa al desnudo. (Ezequiel 18:7)
Si he impedido a los pobres su deseo, O he hecho desfallecer los ojos de la viuda, (Job 31:16)
Fueron apedreados, aserrados, tentados, muertos a espada. Anduvieron de aquí para allá cubiertos con pieles de ovejas y de cabras; destituidos, afligidos, maltratados (Hebreos 11:37)
Y si te ofreces ayudar al hambriento, Y sacias el deseo del afligido, Entonces surgirá tu luz en las tinieblas, Y tu oscuridad será como el mediodía. (Isaías 58:10)
Hermanos míos amados, escuchen: ¿No escogió Dios a los pobres de este mundo para ser ricos en fe y herederos del reino que El prometió a los que Lo aman? (Santiago 2:5)
Juan les respondía: "El que tiene dos túnicas, comparta con el que no tiene; y el que tiene qué comer, haga lo mismo." (Lucas 3:11)
Porque tuve hambre, y ustedes Me dieron de comer; tuve sed, y Me dieron de beber; fui extranjero, y Me recibieron; (Mateo 25:35)
Porque a los pobres siempre los tendrán con ustedes; y cuando quieran les podrán hacer bien; pero a Mí no siempre Me tendrán. (Marcus 14:7)