Nueva Biblia Latinoamericana
Porque somos hechos partícipes de Cristo, si es que retenemos firme hasta el fin el principio de nuestra seguridad. (Hebreos 3:14)
Por lo cual se dice: "SI USTEDES OYEN HOY SU VOZ, NO ENDUREZCAN SUS CORAZONES, COMO EN LA PROVOCACION." (Hebreos 3:15)
Porque ¿quiénes, habiendo oído, Lo provocaron? ¿Acaso no fueron todos los que salieron de Egipto guiados por Moisés? (Hebreos 3:16)
¿Con quiénes se disgustó por cuarenta años? ¿No fue con aquéllos que pecaron, cuyos cuerpos cayeron en el desierto?
¿Y a quiénes juró que no entrarían en Su reposo, sino a los que fueron desobedientes? (Hebreos 3:18)
Vemos, pues, que no pudieron entrar a causa de su incredulidad. (Hebreos 3:19)
Por tanto, temamos, no sea que permaneciendo aún la promesa de entrar en Su reposo, alguno de ustedes parezca no haberlo alcanzado. (Hebreos 4:1)

Otras publicaciones relacionadas con "Hebreos 3:17":

Samuel Acevedo
No temas, ni desmayes
En este artículo, Samuel Acevedo nos recuerda la importancia de no temer ni desmayar en nuestra vida cristiana y cómo mantener una relación viva con Dios para encontrar paz y bendición en Él.


Charles Spurgeon
Paz grandiosa es nuestra porción en Cristo Jesús
Artículo sobre la provisión de Dios para el reposo de su pueblo y cómo encontrar descanso en Cristo Jesús.


Hebreos 3:17 - Referencia Cruzada

Ciertamente todos los que han visto Mi gloria y las señales que hice en Egipto y en el desierto, y que Me han puesto a prueba estas diez veces y no han oído Mi voz, (Números 14:22)
Ahora quiero recordarles a ustedes, aunque ya definitivamente lo saben todo, que el Señor, habiendo salvado al pueblo de la tierra de Egipto, destruyó después a los que no creyeron. (Judas 1:5)
Pero en cuanto a ustedes, sus cadáveres caerán en este desierto. (Números 14:32)
Pero entre éstos no había ninguno de los que fueron contados por Moisés y el sacerdote Aarón, cuando contaron a los Israelitas en el desierto de Sinaí. (Números 26:64)
Así declara el SEÑOR: "Los cadáveres de los hombres caerán Como estiércol sobre la superficie del campo, Y como gavillas tras el segador Sin haber quien las recoja." (Jeremías 9:22)
Además, la mano del SEÑOR fue contra ellos, para destruirlos de en medio del campamento, hasta que todos perecieron. (Deuteronomio 2:15)
En este desierto caerán los cadáveres de ustedes, todos sus enumerados de todos los contados de veinte años arriba, que han murmurado contra Mí. (Números 14:29)
Porque no quiero que ignoren, hermanos, que todos nuestros padres estuvieron bajo la nube y todos pasaron por el mar. (1 Corintios 10:1)