Nueva Biblia Latinoamericana
Lo que digo es esto: la Ley, que vino 430 años más tarde, no invalida un pacto ratificado anteriormente por Dios, como para anular la promesa. (Gálatas 3:17)
Porque si la herencia depende de una ley, ya no depende de una promesa; pero Dios se la concedió a Abraham por medio de una promesa. (Gálatas 3:18)
Entonces, ¿para qué fue dada la Ley? Fue añadida a causa de las transgresiones, hasta que viniera la descendencia a la cual había sido hecha la promesa, Ley que fue promulgada mediante ángeles por mano de un mediador. (Gálatas 3:19)
Ahora bien, un mediador no representa a uno solo, pero Dios es uno solo.
¿Es entonces la Ley contraria a las promesas de Dios? ¡De ningún modo! Porque si se hubiera dado una ley capaz de impartir vida, entonces la justicia ciertamente hubiera dependido de la ley. (Gálatas 3:21)
Pero la Escritura lo encerró todo bajo pecado, para que la promesa que es por la fe en Jesucristo fuera dada a todos los que creen. (Gálatas 3:22)
Antes de venir la fe, estábamos encerrados bajo la ley, confinados para la fe que había de ser revelada. (Gálatas 3:23)

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Gálatas 3:20 - Referencia Cruzada

Escucha, oh Israel, el SEÑOR es nuestro Dios, el SEÑOR uno es. (Deuteronomio 6:4)
En aquel día el SEÑOR hizo un pacto con Abram, diciendo: "A tu descendencia he dado esta tierra, Desde el río de Egipto hasta el río grande, el Río Eufrates: (Génesis 15:18)
¿O es Dios el Dios de los Judíos solamente? ¿No es también el Dios de los Gentiles? Sí, también de los Gentiles, (Romanos 3:29)
Herodes (Agripa I) estaba muy enojado con los de Tiro y de Sidón. Pero ellos, de común acuerdo se presentaron ante él, y habiéndose ganado a Blasto, camarero del rey, pedían paz, pues su región era abastecida por el territorio del rey. (Hechos 12:20)
Cuando Abram tenía noventa y nueve años, el SEÑOR se le apareció, y le dijo: "Yo soy el Dios Todopoderoso; Anda delante de Mí, y sé perfecto. (Génesis 17:1)
Pero ahora Jesús ha obtenido un ministerio tanto mejor, por cuanto El es también el mediador de un mejor pacto, establecido sobre mejores promesas. (Hebreos 8:6)
Lo que digo es esto: la Ley, que vino 430 años más tarde, no invalida un pacto ratificado anteriormente por Dios, como para anular la promesa. (Gálatas 3:17)
Por eso Cristo es el mediador de un nuevo pacto (testamento), a fin de que habiendo tenido lugar una muerte para la redención de las transgresiones que se cometieron bajo el primer pacto (testamento), los que han sido llamados reciban la promesa de la herencia eterna. (Hebreos 9:15)
y a Jesús, el mediador del nuevo pacto, y a la sangre rociada que habla mejor que la sangre de Abel. (Hebreos 12:24)
Porque hay un solo Dios, y también un solo Mediador entre Dios y los hombres, Cristo Jesús hombre, (1 Timoteo 2:5)
No hay árbitro entre nosotros, Que ponga su mano sobre ambos. (Job 9:33)