Nueva Biblia Latinoamericana
Porque celoso estoy de ustedes con celo de Dios; pues los desposé a un esposo para presentarlos como virgen pura a Cristo. (2 Corintios 11:2)
Pero temo que, así como la serpiente con su astucia engañó a Eva, las mentes de ustedes sean desviadas de la sencillez y pureza de la devoción a Cristo. (2 Corintios 11:3)
Porque si alguien viene y predica a otro Jesús, a quien no hemos predicado, o reciben un espíritu diferente, que no han recibido, o aceptan un evangelio distinto, que no han aceptado, bien lo toleran. (2 Corintios 11:4)
Pues yo no me considero inferior en nada a los más eminentes apóstoles.
Pero aunque yo sea torpe en el hablar, no lo soy en el conocimiento; de hecho, por todos los medios se lo hemos demostrado en todas las cosas. (2 Corintios 11:6)
¿O cometí un pecado al humillarme a mí mismo para que ustedes fueran exaltados, porque les prediqué (anuncié) el evangelio de Dios gratuitamente? (2 Corintios 11:7)
A otras iglesias despojé, tomando salario de ellas para servirles a ustedes. (2 Corintios 11:8)

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2 Corintios 11:5 - Referencia Cruzada

Pero por la gracia de Dios soy lo que soy, y Su gracia para conmigo no resultó vana. Antes bien he trabajado mucho más que todos ellos, aunque no yo, sino la gracia de Dios en mí. (1 Corintios 15:10)
Y de aquéllos que tenían reputación de ser algo (lo que eran, nada me importa; Dios no hace acepción de personas); pues bien, los que tenían reputación, nada me enseñaron (contribuyeron). (Gálatas 2:6)
Me he vuelto insensato; ustedes me obligaron a ello. Pues yo debiera haber sido elogiado por ustedes, porque en ningún sentido fui inferior a los más eminentes apóstoles, aunque nada soy. (2 Corintios 12:11)