Y ahora, ¿por qué te detienes? Levántate y bautízate, y lava tus pecados invocando Su nombre.'
(Hechos 22:16)Cuando regresé a Jerusalén y me hallaba orando en el templo, caí en un éxtasis,
(Hechos 22:17)y vi al Señor que me decía: 'Apresúrate y sal pronto de Jerusalén porque no aceptarán tu testimonio acerca de Mí.'
(Hechos 22:18)Entonces yo dije: 'Señor, ellos saben bien que en las sinagogas, una tras otra, yo encarcelaba y azotaba a los que creían en Ti.
Cuando se derramaba la sangre de Tu testigo Esteban (mártir), allí estaba también yo dando mi aprobación, y cuidando los mantos de los que lo estaban matando.'
(Hechos 22:20)Pero El me dijo: 'Ve, porque te voy a enviar lejos, a los Gentiles.'"
(Hechos 22:21)La multitud lo oyó hasta que dijo esto, entonces alzaron sus voces y dijeron: "¡Quita de la tierra a ese hombre! No se le debe permitir que viva."
(Hechos 22:22)Otras publicaciones relacionadas con "Hechos 22:19":
Hechos 22:19 - Referencia Cruzada
Perseguí este Camino hasta la muerte, encadenando y echando en cárceles tanto a hombres como a mujeres,
(Hechos 22:4)Pero cuídense de los hombres, porque los entregarán a los tribunales (sanedrines) y los azotarán en sus sinagogas;
(Mateo 10:17)Yo ciertamente había creído que debía hacer muchos males en contra del nombre de Jesús de Nazaret.
(Hechos 26:9)Saulo (Pablo), respirando todavía amenazas y muerte contra los discípulos del Señor, fue al sumo sacerdote,
(Hechos 9:1)Pero Saulo hacía estragos en la iglesia entrando de casa en casa, y arrastrando a hombres y mujeres, los echaba en la cárcel.
(Hechos 8:3)