Nueva Biblia Latinoamericana
Por tanto, si Dios les dio a ellos el mismo don que también nos dio a nosotros después de creer en el Señor Jesucristo, ¿quién era yo para poder impedírselo a Dios?" (Hechos 11:17)
Al oír esto se calmaron, y glorificaron a Dios, diciendo: "Así que también a los Gentiles ha concedido Dios el arrepentimiento que conduce a la vida." (Hechos 11:18)
Ahora bien, los que habían sido esparcidos a causa de la persecución (tribulación) que sobrevino después de la muerte de Esteban, llegaron hasta Fenicia, Chipre y Antioquía, no hablando la palabra a nadie, sino sólo a los Judíos. (Hechos 11:19)
Pero había algunos de ellos, hombres de Chipre y de Cirene, los cuales al llegar a Antioquía, hablaban también a los Griegos, predicando el evangelio (las buenas nuevas) del Señor Jesús.
La mano del Señor estaba con ellos, y gran número que creyó se convirtió al Señor. (Hechos 11:21)
La noticia de esto llegó a oídos de la iglesia de Jerusalén y enviaron a Bernabé a Antioquía, (Hechos 11:22)
el cual, cuando vino y vio la gracia de Dios, se regocijó y animaba a todos para que con corazón firme permanecieran fieles al Señor; (Hechos 11:23)

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Hechos 11:20 - Referencia Cruzada

Y José, un Levita natural de Chipre, a quien también los apóstoles llamaban Bernabé, que traducido significa Hijo de Consolación, (Hechos 4:36)
Y todos los días, en el templo y de casa en casa, no cesaban de enseñar y proclamar el evangelio (las buenas nuevas) de Jesús como el Cristo (el Mesías). (Hechos 5:42)
A mí, que soy menos que el más pequeño de todos los santos, se me concedió esta gracia: anunciar a los Gentiles las inescrutables riquezas de Cristo, (Efesios 3:8)
Entonces Felipe, comenzando con este pasaje de la Escritura, le anunció el evangelio (las buenas nuevas) de Jesús. (Hechos 8:35)
Enseguida se puso a predicar de Jesús en las sinagogas, diciendo: "El es el Hijo de Dios." (Hechos 9:20)
Pero algunos de la sinagoga llamada de los Libertos (Esclavos Libertados), incluyendo tanto Cireneos como Alejandrinos, y algunos de Cilicia y de Asia (provincia occidental de Asia Menor), se levantaron y discutían con Esteban. (Hechos 6:9)
Decían entonces los Judíos entre sí: "¿Adónde piensa irse Este que no Lo podamos encontrar? ¿Será acaso que quiere irse a la dispersión entre los Griegos y enseñar a los Griegos? (Juan 7:35)
de Frigia y de Panfilia, de Egipto y de las regiones de Libia (Africa) alrededor de Cirene, viajeros de Roma, tanto Judíos como prosélitos (Gentiles convertidos al Judaísmo), (Hechos 2:10)
También discutían con él algunos de los filósofos Epicúreos y Estoicos. Y algunos decían: "¿Qué quiere decir este palabrero?" "Parece ser un predicador de divinidades extrañas," decían otros; porque les predicaba a (anunciaba el evangelio de) Jesús y la resurrección. (Hechos 17:18)
Y cuando salían, hallaron a un hombre de Cirene llamado Simón, al cual obligaron a que llevara Su cruz. (Mateo 27:32)
Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo (el Mesías). (Hechos 8:5)
En la iglesia que estaba en Antioquía había profetas y maestros: Bernabé, Simón llamado Niger, Lucio de Cirene, Manaén, que se había criado con Herodes (Antipas, hijo de Herodes el Grande) el tetrarca, y Saulo. (Hechos 13:1)
pero nosotros predicamos a Cristo crucificado, piedra de tropiezo para los Judíos, y necedad para los Gentiles. (1 Corintios 1:23)
Porque nada me propuse saber entre ustedes excepto a Jesucristo, y Este crucificado. (1 Corintios 2:2)
También hablaba y discutía con los Judíos Helenistas; pero éstos intentaban matarlo. (Hechos 9:29)