Por eso, cuando resucitó de los muertos, Sus discípulos se acordaron de que había dicho esto; y creyeron en la Escritura y en la palabra que Jesús había hablado.
(Juan 2:22)Cuando Jesús estaba en Jerusalén durante la fiesta de la Pascua, muchos creyeron en Su nombre al ver las señales que hacía.
(Juan 2:23)Pero Jesús, en cambio, no se confiaba en ellos, porque los conocía a todos,
(Juan 2:24)y no tenía necesidad de que nadie Le diera testimonio del hombre, porque El conocía lo que había en el interior del hombre.
Había un hombre de los Fariseos, llamado Nicodemo, prominente (principal) entre los Judíos.
(Juan 3:1)Este vino a Jesús de noche y Le dijo: "Rabí, sabemos que has venido de Dios como maestro, porque nadie puede hacer las señales (los milagros) que Tú haces si Dios no está con él."
(Juan 3:2)Jesús le contestó: "En verdad te digo que el que no nace de nuevo no puede ver el reino de Dios."
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Juan 2:25 - Referencia Cruzada
Pero hay algunos de ustedes que no creen." Porque Jesús sabía desde el principio quiénes eran los que no creían, y quién era el que Lo iba a traicionar (entregar).
(Juan 6:64)Porque sabía quién Lo iba a entregar; por eso dijo: "No todos están limpios."
(Juan 13:11)Pero Jesús, consciente de que Sus discípulos murmuraban por esto, les dijo: "¿Esto los escandaliza (los hace tropezar)?
(Juan 6:61)Jesús, conociendo sus pensamientos, dijo: "¿Por qué piensan mal en sus corazones?
(Mateo 9:4)