Nueva Biblia Latinoamericana
Saliendo de allí, iban pasando por Galilea, y El no quería que nadie lo supiera. (Marcus 9:30)
Porque enseñaba a Sus discípulos, y les decía: "El Hijo del Hombre será entregado en manos de los hombres y Lo matarán; y después de muerto, a los tres días resucitará." (Marcus 9:31)
Pero ellos no entendían lo que les decía, y tenían miedo de preguntar a Jesús. (Marcus 9:32)
Llegaron a Capernaúm; y estando ya en la casa, Jesús les preguntaba: "¿Qué discutían por el camino?"
Pero ellos guardaron silencio, porque en el camino habían discutido entre sí quién de ellos era el mayor. (Marcus 9:34)
Jesús se sentó, llamó a los doce discípulos y les dijo: "Si alguien desea ser el primero, será el último de todos y el servidor de todos." (Marcus 9:35)
Tomando a un niño, lo puso en medio de ellos; y tomándolo en los brazos les dijo: (Marcus 9:36)

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Marcus 9:33 - Referencia Cruzada

Al instante Jesús, conociendo en Su espíritu que pensaban de esa manera dentro de sí mismos, les dijo: "¿Por qué piensan estas cosas en sus corazones? (Marcus 2:8)
No hay cosa creada oculta a Su vista, sino que todas las cosas están al descubierto y desnudas ante los ojos de Aquél a quien tenemos que dar cuenta. (Hebreos 4:13)
Para el director del coro. Salmo de David. Oh SEÑOR, Tú me has escudriñado y conocido. (Salmos 139:1)
Cuando llegaron a Capernaúm, se acercaron a Pedro los que cobraban las dos dracmas (salario de dos días) del impuesto del templo y dijeron: "¿No paga su maestro el impuesto del templo?" (Mateo 17:24)
En aquel momento se acercaron los discípulos a Jesús, diciendo: "¿Quién es el mayor en el reino de los cielos?" (Mateo 18:1)
Y comenzó una discusión entre ellos, sobre quién de ellos sería el mayor. (Lucas 9:46)
y no tenía necesidad de que nadie Le diera testimonio del hombre, porque El conocía lo que había en el interior del hombre. (Juan 2:25)
Jesús le dijo por tercera vez: "Simón, hijo de Juan, ¿Me quieres?" Pedro se entristeció porque la tercera vez le dijo: "¿Me quieres?" Y Le respondió: "Señor, Tú lo sabes todo; Tú sabes que Te quiero." "Apacienta Mis ovejas," le dijo Jesús. (Juan 21:17)
A sus hijos mataré con pestilencia, y todas las iglesias sabrán que Yo soy el que escudriña las mentes y los corazones, y les daré a cada uno según sus obras. (Apocalipsis 2:23)