Nueva Biblia Latinoamericana
Esto El me mostró: El Señor estaba junto a un muro hecho a plomo, y tenía en Su mano una plomada. (Amós 7:7)
Y el SEÑOR me dijo: "¿Qué ves, Amós?" "Una plomada," le respondí. Entonces el Señor dijo: "Voy a poner una plomada En medio de Mi pueblo Israel. Ya no volveré a dejarlos sin castigo. (Amós 7:8)
Los lugares altos de Isaac serán asolados Y los santuarios de Israel destruidos; Y Yo me levantaré con espada contra la casa de Jeroboam." (Amós 7:9)
Entonces Amasías, sacerdote de Betel (Casa de Dios), envió palabra a Jeroboam, rey de Israel: "Amós conspira contra ti en medio de la casa de Israel; la tierra ya no puede soportar todas sus palabras.
Porque así dice Amós: 'Jeroboam morirá a espada y ciertamente Israel saldrá en cautiverio de su tierra.'" (Amós 7:11)
Entonces Amasías dijo a Amós: "Vete, vidente, huye a la tierra de Judá, come allí pan y allí profetiza. (Amós 7:12)
Pero en Betel no vuelvas a profetizar más, porque es santuario del rey y residencia real." (Amós 7:13)

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Amós 7:10 - Referencia Cruzada

Entonces dijeron: "Vengan y tramemos planes contra Jeremías. Ciertamente la ley no le faltará al sacerdote, ni el consejo al sabio, ni la palabra al profeta. Vengan, vamos a herirlo con la lengua, y no hagamos caso a ninguna de sus palabras." (Jeremías 18:18)
Y comenzaron a acusar a Jesús, diciendo: "Hemos hallado que éste pervierte a nuestra nación, prohibiendo pagar impuesto al César, y diciendo que El mismo es Cristo (el Mesías), un Rey." (Lucas 23:2)
Les dimos órdenes estrictas de no continuar enseñando en este Nombre, y han llenado a Jerusalén con sus enseñanzas, y quieren traer sobre nosotros la sangre de este Hombre." (Hechos 5:28)
Cuando Jesús llegó al templo, los principales sacerdotes y los ancianos del pueblo se acercaron a El mientras enseñaba, diciendo: "¿Con qué autoridad haces estas cosas, y quién Te dio esta autoridad?" (Mateo 21:23)
Y sus hermanos le dijeron: "¿Acaso reinarás sobre nosotros? ¿O acaso te enseñorearás sobre nosotros?" Y lo odiaron aún más por causa de sus sueños y de sus palabras. (Génesis 37:8)
Y ahora ustedes intentan resistir al reinado del SEÑOR que está en manos de los hijos de David, porque son una gran multitud y tienen con ustedes los becerros de oro que Jeroboam les hizo por dioses. (2 Crónicas 13:8)
Cuando Acab vio a Elías, Acab le dijo: "¿Eres tú, perturbador de Israel?" (1 Reyes 18:17)
El SEÑOR te ha puesto por sacerdote en lugar del sacerdote Joiada, para estar encargado en la casa del SEÑOR de todo loco que profetice, a fin de que lo pongas en el cepo y la argolla. (Jeremías 29:26)
Pues hemos descubierto que este hombre es verdaderamente una plaga, y que provoca disensiones entre todos los Judíos por el mundo entero, y es líder de la secta de los Nazarenos. (Hechos 24:5)
En el año quince de Amasías, hijo de Joás, rey de Judá, Jeroboam, hijo de Joás, rey de Israel, comenzó a reinar en Samaria, y reinó cuarenta y un años. (2 Reyes 14:23)
Cuando el sacerdote Pasur, hijo de Imer, que era el oficial principal en la casa del SEÑOR, oyó a Jeremías profetizar estas cosas, (Jeremías 20:1)
Al oír esto, se sintieron profundamente ofendidos, y crujían los dientes contra él. (Hechos 7:54)
Cuando Jeremías terminó de decir todo lo que el SEÑOR le había mandado que hablara a todo el pueblo, lo apresaron los sacerdotes, los profetas y todo el pueblo, diciendo: "De cierto, morirás. (Jeremías 26:8)
Estando él a la Puerta de Benjamín, había allí un capitán de la guardia que se llamaba Irías, hijo de Selemías, hijo de Hananías, el cual apresó al profeta Jeremías, diciéndole: "Tú vas a pasarte a los Caldeos." (Jeremías 37:13)
Hizo también casas en los lugares altos, y nombró sacerdotes de entre el pueblo que no eran de los hijos de Leví. (1 Reyes 12:31)
Entonces dijeron los oficiales al rey: "Den muerte ahora a este hombre, porque él desanima a los hombres de guerra que quedan en esta ciudad y a todo el pueblo diciéndoles tales palabras. Este hombre no busca el bien de este pueblo, sino el mal." (Jeremías 38:4)
Después de este hecho, Jeroboam no se volvió de su mal camino, sino que volvió a nombrar sacerdotes para los lugares altos de entre el pueblo; al que lo deseaba lo investía para que fuera sacerdote de los lugares altos. (1 Reyes 13:33)