Nueva Biblia Latinoamericana
Ciertamente he oído a Efraín lamentarse: 'Me has castigado, y castigado fui Como becerro indómito. Hazme volver para que sea restaurado, Pues Tú, SEÑOR, eres mi Dios. (Jeremías 31:18)
Porque después que me aparté, me arrepentí, Y después que comprendí, me di golpes en el muslo; Me avergoncé y también me humillé, Porque llevaba el oprobio de mi juventud.' (Jeremías 31:19)
¿No es Efraín Mi hijo amado? ¿No es un niño encantador? Pues siempre que hablo contra él, Lo recuerdo aún más. Por eso Mis entrañas se conmueven por él, Ciertamente tendré de él misericordia," declara el SEÑOR. (Jeremías 31:20)
Levanta para ti señales, Coloca para ti majanos; Presta atención a la calzada, Al camino que anduviste. Vuelve, virgen de Israel, Vuelve a estas tus ciudades.
¿Hasta cuándo andarás errante, Hija infiel? Porque el SEÑOR ha creado algo nuevo en la tierra: La mujer rodeará al hombre." (Jeremías 31:22)
Así dice el SEÑOR de los ejércitos, el Dios de Israel: "Otra vez hablarán esta palabra en la tierra de Judá y en sus ciudades, cuando Yo restaure su bienestar (haga volver a sus cautivos): 'El SEÑOR te bendiga, morada de justicia, Monte santo.' (Jeremías 31:23)
Y morarán juntos en ella Judá y todas sus ciudades, los labradores y los que van con los rebaños. (Jeremías 31:24)

Otras publicaciones relacionadas con "Jeremías 31:21":

Omar Soto
En alas de un águila
En este artículo, Omar Soto habla sobre la importancia de tener fe en Dios y confiar en su poder, como se menciona en el capítulo 40 de Isaías. También se discute la necesidad de crecer en la fe y aprender a volar como las águilas. El autor ora por nuevas fuerzas y bendiciones para el pueblo de Dios en el año 2010.


Dr. Roberto Miranda
Al que ama mucho, se le perdona mucho
En este artículo, el Dr. Roberto Miranda reflexiona sobre la misericordia divina y la importancia del arrepentimiento y la humildad en nuestra relación con Dios.


Jeremías 31:21 - Referencia Cruzada

Huyan de en medio de Babilonia, Y salve cada uno su vida. No perezcan por su culpa, Pues éste es el tiempo de la venganza del SEÑOR; El le dará su pago. (Jeremías 51:6)
Salgan de Babilonia, huyan de los Caldeos; Con voz de júbilo anuncien, proclamen esto, Publíquenlo hasta los confines de la tierra; Digan: "El SEÑOR ha redimido a Su siervo Jacob." (Isaías 48:20)
Apártense, apártense, salgan de allí, Nada inmundo toquen. Salgan de en medio de ella, purifíquense, Ustedes que llevan las vasijas del SEÑOR. (Isaías 52:11)
Josafat tuvo miedo y se dispuso a buscar al SEÑOR, y proclamó ayuno en todo Judá. (2 Crónicas 20:3)
No confíen ustedes en la opresión, Ni en el robo pongan su esperanza; Si las riquezas aumentan, no pongan el corazón en ellas . (Salmos 62:10)
Cuando lo vi, reflexioné sobre ello; Miré, y recibí instrucción. (Proverbios 24:32)
Vuelvan, hijos infieles,' declara el SEÑOR, 'porque Yo soy su dueño, y los tomaré, uno de cada ciudad y dos de cada familia, y los llevaré a Sion.' (Jeremías 3:14)
les dijo: "Fijen en su corazón todas las palabras con que les advierto hoy: ordenarán a sus hijos que obedezcan cuidadosamente todas las palabras de esta ley. (Deuteronomio 32:46)
Los que escaparon de la espada, Caminen, no se detengan; Acuérdense desde lejos del SEÑOR, Y venga Jerusalén a su memoria. (Jeremías 51:50)
Ahora pues, así dice el SEÑOR de los ejércitos: "¡Consideren bien sus caminos! (Hageo 1:5)
¡Cuán bienaventurado es el hombre cuyo poder está en Ti, En cuyo corazón están los caminos a Sion ! (Salmos 84:5)
Cuando Yo los esparza entre los pueblos, Aun en lejanas tierras se acordarán de Mí, Y vivirán con sus hijos, y volverán. (Zacarías 10:9)
Pasen, pasen por las puertas; Abran camino al pueblo. Construyan, construyan la calzada; Quiten las piedras, alcen estandarte sobre los pueblos. (Isaías 62:10)
Preguntarán por el camino de Sion, Hacia donde volverán sus rostros; Vendrán para unirse al SEÑOR En un pacto eterno que no será olvidado. (Jeremías 50:5)
De nuevo te edificaré, y serás reedificada, Virgen de Israel; De nuevo tomarás tus panderos, Y saldrás a las danzas con los que se divierten. (Jeremías 31:4)
Aquéllos de entre todas las tribus de Israel que habían resuelto en su corazón buscar al SEÑOR, Dios de Israel, los siguieron a Jerusalén para sacrificar al SEÑOR, Dios de sus padres. (2 Crónicas 11:16)
Y se dirá: "Construyan, construyan, preparen el camino, Quiten los obstáculos del camino de Mi pueblo." (Isaías 57:14)
Y el hombre me dijo: "Hijo de hombre, mira con tus ojos, oye con tus oídos y presta atención a todo lo que te voy a mostrar; porque has sido traído aquí para que te sea mostrado. Declara todo lo que ves a la casa de Israel." (Ezequiel 40:4)
Además, en mi amor por la casa de mi Dios, el tesoro que tengo de oro y de plata, lo doy a la casa de mi Dios, además de todo lo que ya he provisto para la santa casa, (1 Crónicas 29:3)
¡Escúchenme! Huyan de la tierra del norte," declara el SEÑOR, "pues Yo los dispersé por los cuatro vientos del cielo," declara el SEÑOR. (Zacarías 2:6)