Nueva Biblia Latinoamericana
Porque las costumbres de los pueblos son vanidad; Pues un leño del bosque es cortado, Lo trabajan las manos de un artífice con el cincel; (Jeremías 10:3)
Con plata y oro lo adornan, Con clavos y martillos lo aseguran Para que no se mueva. (Jeremías 10:4)
Como los espantapájaros de un pepinar, Sus ídolos no hablan; Tienen que ser transportados, Porque no andan. No les tengan miedo, Porque no pueden hacer ningún mal, Ni tampoco hacer bien alguno." (Jeremías 10:5)
No hay nadie como Tú, oh SEÑOR. Grande eres Tú, y grande es Tu nombre en poderío.
¿Quién no Te temerá, oh Rey de las naciones? Porque esto se Te debe. Porque entre todos los sabios de las naciones, Y en todos sus reinos, No hay nadie como Tú. (Jeremías 10:7)
Pero ellos a una son torpes y necios En su enseñanza de vanidades, pues su ídolo es un leño. (Jeremías 10:8)
Plata laminada es traída de Tarsis Y oro de Ufaz. Ese ídolo es obra de un artífice y de las manos de un orfebre; Su vestido es de violeta y púrpura; Todo ello obra de peritos. (Jeremías 10:9)

Otras publicaciones relacionadas con "Jeremías 10:6":

Charles Spurgeon
Nadie puede dañar a aquellos que confían en el Dios vivo
Artículo sobre la protección divina para aquellos que confían en el Dios vivo y cómo los miedos supersticiosos y la brujería no pueden afectar al pueblo de Dios.


Charles Spurgeon
Ninguna arma forjada contra ti prosperará
Artículo sobre la promesa divina de que ninguna arma forjada contra ti prosperará, y cómo las falsedades y calumnias se volverán en honra para los hombres buenos.


Jeremías 10:6 - Referencia Cruzada

Grande es el SEÑOR, y digno de ser alabado en gran manera, Y Su grandeza es inescrutable. (Salmos 145:3)
Porque esta vez enviaré todas Mis plagas sobre ti, sobre tus siervos y sobre tu pueblo, para que sepas que no hay otro como Yo en toda la tierra. (Éxodo 9:14)
En verdad, su roca no es como nuestra Roca; Aun nuestros mismos enemigos así lo juzgan. (Deuteronomio 32:31)
No hay nadie como Tú entre los dioses, oh Señor, Ni hay obras como las Tuyas. (Salmos 86:8)
¿A quién, pues, asemejarán a Dios, O con qué semejanza Lo compararán? (Isaías 40:18)
Oh Señor DIOS, por eso Tú eres grande; pues no hay nadie como Tú, ni hay Dios fuera de Ti, conforme a todo lo que hemos oído con nuestros oídos. (2 Samuel 7:22)
¿A quién, pues, ustedes Me harán semejante Para que Yo sea su igual?" dice el Santo. (Isaías 40:25)
Ahora pues, Dios nuestro, Dios grande, poderoso y temible, que guardas el pacto y la misericordia, No parezca insignificante ante Ti toda la aflicción Que nos ha sobrevenido, a nuestros reyes, a nuestros príncipes, a nuestros sacerdotes, a nuestros profetas, a nuestros padres y a todo Tu pueblo, Desde los días de los reyes de Asiria hasta el día de hoy. (Nehemías 9:32)
que muestras misericordia a millares, pero que castigas la iniquidad de los padres en sus hijos después de ellos. Oh grande y poderoso Dios, el SEÑOR de los ejércitos es Su nombre. (Jeremías 32:18)
Nadie hay como el Dios de Jesurún (Israel), Que cabalga los cielos para venir en tu ayuda, Y las nubes, en Su majestad. (Deuteronomio 33:26)
Clama y grita de júbilo, habitante de Sion, Porque grande es en medio de ti el Santo de Israel. (Isaías 12:6)
Grande es nuestro Señor, y muy poderoso; Su entendimiento es infinito. (Salmos 147:5)
¡Cuán grandes son Sus señales, Y cuán poderosas Sus maravillas! Su reino es un reino eterno, Y Su dominio de generación en generación. (Daniel 4:3)
Pero al fin de los días, yo, Nabucodonosor, alcé mis ojos al cielo, y recobré mi razón, y bendije al Altísimo y alabé y glorifiqué al que vive para siempre. Porque Su dominio es un dominio eterno, Y Su reino permanece de generación en generación. (Daniel 4:34)
Cántico. Salmo de los hijos de Coré. Grande es el SEÑOR, y muy digno de ser alabado En la ciudad de nuestro Dios, Su santo monte. (Salmos 48:1)
Porque, ¿quién en el firmamento se puede comparar al SEÑOR? ¿Quién entre los hijos de los poderosos es como el SEÑOR, (Salmos 89:6)
Porque grande es el SEÑOR, y muy digno de ser alabado; Temible es El sobre todos los dioses. (Salmos 96:4)
¿Quién como Tú entre los dioses, oh SEÑOR? ¿Quién como Tú, majestuoso en santidad, Temible en las alabanzas, haciendo maravillas? (Éxodo 15:11)
Mañana," respondió Faraón. Entonces Moisés dijo: "Sea conforme a tu palabra para que sepas que no hay nadie como el SEÑOR nuestro Dios. (Éxodo 8:10)
Cuando vi su temor, me levanté y dije a los nobles, a los oficiales y al resto del pueblo: "No les tengan miedo. Acuérdense del Señor, que es grande y temible, y luchen por sus hermanos, sus hijos, sus hijas, sus mujeres y sus casas." (Nehemías 4:14)
Acuérdense de las cosas anteriores ya pasadas, Porque Yo soy Dios, y no hay otro; Yo soy Dios, y no hay ninguno como Yo, (Isaías 46:9)
Dirán todos mis huesos: "SEÑOR, ¿quién como Tú, Que libras al afligido de aquél que es más fuerte que él, Sí, al afligido y al necesitado de aquél que lo despoja?" (Salmos 35:10)
¿A quién Me asemejarán, Me igualarán o Me compararán Para que seamos semejantes? (Isaías 46:5)
Porque desde la salida del sol hasta su puesta, Mi nombre será grande entre las naciones, y en todo lugar se ofrecerá incienso a Mi nombre, y ofrenda pura de cereal; porque grande será Mi nombre entre las naciones," dice el SEÑOR de los ejércitos. (Malaquías 1:11)